Capitulo 1

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Siempre le he estado admirando desde lejos. Desde el primer momento en que lo vi, en que vi la textura de su piel, la forma de su sonrisa, el brillo de sus ojos, supe que había encontrado al verdadero significado de la belleza encarnada en una persona. Y es que la palabra que más encaja para describir a Kim Taehyung es arte.

Ese día hice unos trazos rápidos en una servilleta, de su perfil concentrado en decorar una taza de café.

Ese día sentí como si hubiera extendido mi brazo hacia la perfección, como si hubiera intentando tocar el más etéreo tulipán resguardado en una vitrina, como si hubiera intentado acariciar las alas de un ángel sin su consentimiento.

El agridulce sabor de la tentación se hizo presente en mi boca, y me prometí a mí mismo no volver a retratar la perfección.

Sin embargo, aquí me encuentro, terminando la quinta pintura que hago de su rostro.

Suelto un suspiro y bajo con cuidado mi pincel. Paso las manos por mi cara con frustración después de asegurarme de no tener manchas frescas de pintura.

Necesito verle otra vez.

Tal vez esté mal, tal vez debería detenerme. Pero la atracción que siento es tan fuerte que me devuelve al mismo punto una y otra vez.

Me pongo de pie y camino hasta la puerta del estudio, tomo mi abrigo del perchero y me lo pongo al mismo tiempo que salgo de ahí.

Me detengo unos momentos a admirar el ambiente que se pinta en la ciudad. Con el invierno a la vuelta de la esquina, el cielo estaba de un fresco tono entre gris y celeste, brillantes nubes blancas resaltaban, pero a la vez parecían perderse si intentabas buscarlas, como esas pequeñas partículas de polvo que cuando enfoca tu vista en ellas, desaparecen.

Camino unas cuantas calles hasta llegar a la popular cafetería en la que Taehyung trabaja. Esta tenía un nombre simple y ciertamente cálido una vez conocías su significado, "Yeontan", nada más y nada menos que el nombre de la mascota del dueño del local.

Nadie cuestiona la decisión del nombre, porque después de todo, es imposible llevarle la contraria al rostro iluminado de orgullo y amor que tiene Taehyung cuando habla de su mascota.

Entro a la cafetería, siendo recibido por la calidez proporcionada por la calefacción y un agradable aroma a café que me hace sonreír.

Me acerco a la caja registradora, la cajera me reconoce, ya fui nombrado un cliente habitual en este local. La joven que me atendía, Kim Taeyeong, 17 años, hermana menor de Taehyung. Vaya que sus padres son originales con los nombres. Castaña y muy bonita, con unos ojos verdes cual prado y una sonrisa brillante. Por lo que sé, que me ha contado en conversaciones casuales, aún estudia, ayuda a sus padres en casa y trabaja medio tiempo en la cafetería de su hermano, pero ella exclama orgullosa de sí misma en que puede con todo y no le pesa, que el sentimiento de saber que es útil compensa cualquier cansancio. Es bueno saber que la sociedad no está tan perdida.

— ¡Bienvenido, Yoongi! — habló ella, con una sonrisa amable y llena de energía. — ¿Lo de siempre?

— Sí, por favor. — ella asiente y yo saco mi billetera. — Toma asiento, en unos minutos te entregamos tu pedido. — realizo pago y voy a sentarme, al mismo lugar de siempre; en la mesa a la izquierda junto al gran ventanal que deja gran vista de lo que hay y todo lo que pasa afuera.

Me gusta observar a la gente, imagino qué hacen, cómo viven, por qué hacen lo que hacen en ese momento, si habrá alguien esperándolos en sus casas, si son felices o no. Esta última siempre es difícil de responder. Muchas personas viven bien, pero saben que podrían estar mejor, otras muchas no hacen lo que realmente quieren hacer, pero hacen lo que es necesario. "¿Soy feliz?" Es una pregunta complicada, porque ¿qué es realmente la felicidad? ¿Una mascota, una pareja, una casa lujosa, dinero? Aún no lo sé, así que si me preguntas si soy feliz... no respondería, quizá.

— Tu café. — Taeyeong posó mi taza de café negro en la mesa, y cuando estaba por agradecerle, agregó: — también me dijeron que te diera esto. — me tendió una pequeña hoja blanca, en la que notablemente venía algo escrito. La tomé y antes de que pudiera agradecerle, otra vez, se fue, con una sonrisa pintada en el rostro.

"Me dijeron que te entregara esto", eso me hacía preguntarme de quién vendría esa nota.
Dejé de someterme a mí mismo a tal estado de curiosidad y leí la nota.

"Eres bastante talentoso, pintor.

-Taehyung."

Levanté la mirada, inmediatamente la llevé a la caja registradora, donde estaba Taeyeon, mirándome con una sonrisa mientras recargaba sus codos en el mostrador y sostenía su rostro entre sus manos. Se incorporó y apuntó a la izquierda, seguí su mano con la mirada hasta que me topé con los hermosos ojos azules de Taehyung, tenía una sonrisa burlona en los labios, fue ahí que supe que había sido descubierto.

Volví a mi lugar, tomando mi café como si pudiera esconderme en él. Estaba avergonzado, claro, ¿cómo no iba a estarlo cuando el ángel más hermoso me descubrió intentando retratar su belleza?
Al menos no parecía molestarle, ya era un punto a favor. Pero creo que ahora ya no podré quedarme entre las sombras a observar.

[✿]
¿Saben? Volví a escribir el capítulo, creo que la historia va a cambiar un poco a como la tenía planeada. Pero en fin, me gusta más así. La descripción y el prólogo no coinciden muy bien con el capítulo, por lo mismo que lo cambié. Después corregiré eso.

No aguanté la tentación de publicar este fic, lo siento. ♡

Painter |✿| YoonTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora