𝐍𝐨𝐭 𝐓𝐡𝐚𝐭 𝐊𝐢𝐧𝐝 𝐎𝐟 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚 | 𝐳𝐣𝐦+𝐧𝐣𝐡 [𝑎𝑑𝑎𝑝𝑡𝑎𝑐𝑖𝑜𝑛]

Capítulo 1.

Él sonríe con una pizca de atrevimiento, mira a todos los omegas quienes lo observan y se pasa la lengua por los labios, lleva su copa de champagne a sus labios y bebe de ella. Ve cómo un omega lo observa de arriba a abajo, niega mientras ríe y le hace una seña para que se acerque, se acerca a su oído y le susurra algo que hace sonrojar y asentir al omega.

Deja el dinero encima de la mesada que había y se va con el omega.

Zayn es el alfa más deseado de todo Londres; tiene veinticinco años, es alto, delgado, pasee muy bonitos rasgos y ojos, pero sobre todo su polla.

Oh vaya, eso es lo que todos los omegas han dicho de Zayn cada vez que se acuestan con él, es el mejor alfa en la cama y bueno, posee esa cualidad tan perfecta; tener una polla que mida más de veinte centímetros era tremendo detalle en aquel alfa.

Él es el casanova de la universidad, tiene al omega que quiere, donde y cuando él lo desea. También puede decir que era un moja-bragas con las mujeres betas, se ha acostado con algunas; sin embargo, prefiere a los omegas hombres, disfruta más de follar a un hombre que a una mujer, siempre dice eso.

También es multimillonario, su padre es el dueño de la cadena de hoteles de toda Europa, por lo cual también tiene a los omegas que desea por esa razón.

—Joder, Zayn, eres el mejor en esto—Zayn rueda los ojos y comienza a gemir una vez que el omega comienza a montarlo.

Él no iba a mentir, aquel omega era atractivo, pero no lo estaba complaciendo como él esperaba, por lo tanto se lo follaría y después le mentiría diciéndole que lo llamaría.

Putas mentiras.

Nunca había llamado a un omega y nunca lo haría, sólo los follaba una vez y nunca más.

Él no cree en el amor, puede ser porque sus padres nunca fueron felices con el otro, y al vivir en esa situación y al imitar a su padre al tener todo tipo de omega a sus pies, hizo que él haga exactamente lo mismo.

Aunque él es soltero y su padre no, bueno no lo era hasta dos meses atrás cuando su madre decidió irse ya que no aguantaba más la situación de siempre ver cómo su marido se tiraba a cualquier omega que caminaba.

—¿Me llamarás?—pregunta el omega.

Zayn ríe por dentro, porque siempre sucede lo mismo. Todos aquellos omegas hacían la misma pregunta. No, no los llamaría, pero quedaría mal, por lo que asentía y se iba no sin antes pagar el hotel. Claro que él se iba una vez que los omegas se durmieran para no aguantar tantas preguntas.

Mira la hora y suspira, recién son las doce, por lo tanto tiene tiempo para otra fiesta y tal vez otro polvo.

—Hola, bro—dice Zayn subiendo a su auto—. Ten por seguro que me tendrás ahí.