No estoy en posición de exigir, pelear o de sentirme reñido. Además de complicado y carente, soy impredecible. Ni siquiera yo mismo sé si voy a querer golpearte o abrazarte cuando te acerques a mí. Pero, por favor, no me grites, no me trates mal. Ya estoy despedazado, roto, partido, y una lesión más me haría partirme en minúsculos e incontables pedacitos llenos de sentimientos demasiado profundos para un cuerpo tan pequeño como el mío.
Te voy a lastimar, no tengas dudas de ello. Y serán tantas heridas que algunas no sanarán. No creas que vas a llegar, bañarte en un mar de vidrios rotos y aún así saldrás ileso.
Mi amor inevitablemente te va a lastimar, este será tu veneno y al mismo tiempo tu casi cura.
¿Sabés lo que deseo? Deseo abrazos y besos casi permanentes, un sincero "¿cómo estás?", un "¿comiste bien?" e incluso un "¿llegaste bien a casa?". Yo no necesito de esas palabras que suenan tan falsas, prefiero otros "te amo", aquellos que la gente ignora.
Quiero a un hombre que al verme me abrace y que no sea grosero, él sabrá que estoy teniendo un mal día. Quiero que se ría de mis chistes malos solamente para verme sonreir orgulloso. Quiero algo casi imposible de tener.
Debí verme como estúpido al creer que alguien podría cumplir con la complejidad que hay en lo que pido, y sobre todo al creer que alguien podría entenderlo, y a amar la complejidad que hay en mí. Lo peor es que lo creí con Koo Junhoe, Kim Hanbin, Kim Jiwon y muchos más nombres que pertenecen al mismo error causado por mi estupidez y, quizás, solo quizás, desesperación.
Yo, un caso complejo y tal vez raro, puedo atreverme a decir que parejas como yo son las mejores que se pueden tener porque el amor es eso. Es tragarse el orgullo, amar complejidad y hacer todo lo posible para entender los enigmas de la persona que amás.
Y yo, como un eterno carente, digo que nuestra curación es el amor. Solo necesitamos encontrar aquel amor eternamente incondicional para llenar nuestro vacío y poder juntar nuestros pedacitos.
Un detalle es que no todo amor es romántico, también puede ser aquel amigo que te salva en las pruebas de matemática y que te defiende incluso cuando no merecés ser defendido.
Yo sé que no lo merezco, pero clamo en voz baja un amor para acabar con mi ansiedad. Quiero un amor como el de los libros que leo, de ese que dura por el resto de los tiempos.
Mi nombre es Kim Jinhwan y soy un carente de amor.
