No puedo juzgarte
pues ni siquiera he lidiado con tus demonios.
Pero si de algo sé
es que aunque seamos diferentes,
quiero estar a tu lado.
Mantén la cabeza alta,
llegarán los días felices.
Se perseverante,
nadie dijo que esto fuese fácil.
No siempre estaré aquí, y la vida,
da muchos golpes.
No entierres lo vivido,
pues los recuerdos nos hacen fuertes
y el olvido,
inútiles.
