My Love

One Shot

POV SEO YI SOO.

Tengo veinticinco años y nunca he sido besada. Por esta simple razón a veces siento que mi vida es patética, que yo soy patética.

Soy la tercera de cuatro hijas, todas mis hermanas son hermosas y parece ser que el hada de la belleza me saltó porque no me parezco a ellas.

Ah Ri, la mayor, es alta, delgada, tiene la mirada llena de dulzura y fue patinadora artística, una de las mejores del país. Se casó hace dos años con un empresario muy guapo que se enamoró de ella en cuanto la conoció.

SeRa, la segunda, es bajita pero es como un hada, tiene los ojos más grandes que he visto, piernas delgadas y un cuello estilizado. Es maestra de ballet, quería llegar a ser bailarina profesional pero una lesión se lo impidió. También está casada, con su médico. Es un hombre increíble, me gusta mucho verlos juntos porque puedo notar el amor por mi hermana en su mirada.

Finalmente está mi hermana pequeña: HaNeul, ella es modelo, no hace falta describirla.

La única "sin chiste" de la familia soy yo: Yi Soo. Siempre fui consciente de que no era muy agraciada pero al menos el hada de la belleza me dio el don de crear cosas hermosas. Me convertí en diseñadora de muebles, mi padre es carpintero y yo siempre estaba con él en su taller. No me gustaba estar cerca de mis hermanas porque me hacían sentir algo incómoda, yo no era nada impresionante.

Mamá siempre me regañó por estar en el taller con papá y sus empleados pero nunca le hice caso, ellos me enseñaron a conocer la madera y lo que puedes hacer con ella.

Al finalizar la secundaria decidí estudiar diseño, papá fue mi más grande apoyo. Ahí aprendí a usar otros materiales pero siempre he preferido la madera.

Logré que una gran empresa me contratara justo al terminar mi carrera, llevo cuatro años trabajando ahí como una de sus mejores diseñadoras.

Desde que tengo uso de razón, mamá nos metió en la cabeza que debemos encontrar un hombre que nos ame para así formar una gran familia feliz como ella lo hizo con papá. Se volvió loca de felicidad cuando se enteró de la boda de Ah Ri, con Se Ra ocurrió lo mismo.

Yo nunca he tenido una cita, siempre fui tímida, callada, hacía hasta lo imposible para no destacar en ningún lado.

-Yi Soo, ¿por qué nunca traes algún chico a casa? -preguntó mamá una vez.

-Porque ninguno la mira -respondió HaNeul.

-HaNeul, no seas grosera -dijo SeRa.

Ella siempre me defendió de mi madre y las maldades de HaNeul.

-No te preocupes SeRa, tiene razón -dije y me levanté de la mesa.

Las oí discutir desde mi habitación, esa fue una de las peores peleas entre ellas. Yo tenía quince años en ese entonces. Una semana después un chico bastante atractivo se acercó a mí y me invitó a salir, no lo podía creer. A pesar de que era sospechoso lo acepté de inmediato, al fin mi mamá me dejaría en paz. Recuerdo que ese día llegué a casa y les conté todo. Ah Ri no me hizo mucho caso, SeRa fue la única que se alegró por mí, HaNeul solo se rio.

Un día antes de la cita escuché las verdaderas razones por las que aquel chico me invitó a salir.

-Por supuesto que esa chica no me gusta -dijo riéndose- ¿Han visto a sus hermanas? Son hermosas, aprovecharé la oportunidad para acercarme a ellas.

Sonreí con tristeza y me alejé, no me sorprendí en lo absoluto, era de esperarse. Evidentemente no salí con él, simplemente le di una excusa y no me volví a acercar a él.