El viento acompañaba sus pisadas
Su cabello revuelto acariciaba su rostro
El mar refrescaba sus pies y los susurros de este, eran música para ella.
Abandono todo por la brisa marina.
Esperando el amor a la distancia, su cielo se tornó de un color mágico, donde los deseos en cada minuto crecían y en segundos la noche baño el cielo oscureciendo la mente y agrandando los miedos.
Cada día esperaba, cada día sus pies tocaban ese océano azul y cada día el viento abrazaba su piel acompañándola en su espera, mientras que en su mente siempre mantenía el recuerdo de su promesa.
Solitarios días donde al caer noche las fogatas abrigaban la playa
Donde el fuego danzaba en las cenizas
Viendo como ella, callada y solitaria
Esperaba día y noche sin perder la esperanza.
Las gaviotas se acostumbraron a su belleza extraña
Esas aguas cristalinas reflejaban el dolor de su mirada.
La espera se hacía eterna
La arena brillaba por el sol
Los cangrejos la acompañaron en su espera
Tantas puestas de sol
Tantas noches estrelladas que observaban en silencio
Tantas lagrimas derramo
Por un amo que jamás regreso...
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La espera a la orilla del Mar
Short StorySolitarios días donde al caer noche las fogatas abrigaban la playa Donde el fuego danzaba en las cenizas Viendo como ella, callada y solitaria Esperaba día y noche sin perder la esperanza.
