Ciudad de la Cantera Rosa, 15 de septiembre de 2018.
Adnes:
El cielo resplandecía y mi ánimo se iba desmoronando. Realmente no sé qué pasaba entre tu y yo, supongo que estábamos enloqueciendo y llorando con el corazón afligido dentro de nosotros mismos sin hablarlo. A pesar del gran amor que sentí por ti tuve que dejarte, pues tu abandono no lo soportaba, me hacía mal emocional. Ya no me buscabas, ya no me escribías.
Desde que te dejé siento un inmenso dolor en el pecho, le perdí el sabor a la comida y divago más de lo normal. Lloré a más no poder -ya me dolía hacerlo-, me obligué a dormir sin abrazar aquel peluche que me obsequiaste y en un baúl deposité lo que quedó. Sabía que nunca volvería contigo, que nunca volvería a tenerte... Hace un mes que te dejé y mi vida ha cambiado drásticamente: no hallo en donde meter mi tristeza, a veces no me encuentro, a veces me reconozco. En ocasiones exploto de felicidad con carcajadas y a veces quisiera pegarme un tiro y detener el gatillo con la otra mano. Mientras la gente grita su libertad yo me cuestiono si realmente soy libre de ti, pues te sigo pensando vagamente en cada intervalo vago de mi vida, cada noche, cada que el aire frío roza mi rostro susurrando tu nombre, en cada silencio, cada madrugada solitaria en la cama donde tantas veces fuimos uno. Recuerdo con nostalgia cada error, cada risa, cada salida, cada secreto, cada centímetro de tu piel y cada lágrima. En la silenciosa oscuridad y crudeza de mi insomnio reconozco que te extraño un poco, por ello te he escrito... Nunca creí que los finales fuesen tan difíciles, nunca pensé que dejarte sería como ahogarse en el mar. No sé nadar.
¿Cómo volveré a amar? ¿Por dónde he de empezar a acomodar el desastre que tu maremoto sentimental ha dejado al pasar? ¿Cómo acabo con las secuelas de tu amor? El olvido no me reconoce porque soy una bastarda de la condena y el tiempo. Debo de levantarme y recordar a la mujer fuerte y segura que era. No quiero compasión, quiero ir por mí ahora. Y a pesar del amor te que tenía no volveré contigo nunca más. Te detesto por dejarme perdida por la vida, yo que siempre sacrifiqué mi felicidad por ti a cambio de nada, solo olvido y abandono.
No volveremos a encontrarnos mas que en sueños que el inconsciente arroja y en otras voces que preguntan y que lamentan. No lloraré más, tengo un pescadito de oro en mi almohada. No seremos ningún Florentino ni Fermina... aunque ese beso tuyo lo lleve en el alma y solo Dios sepa cuánto te amé.
-Rose.
![](https://img.wattpad.com/cover/77431764-288-k785516.jpg)
ESTÁS LEYENDO
The things I always wanted to say
Poetry¿Alguna vez te has sentido inútil? ¿Tontx? ¿Deprimidx? Entonces esto es para ti...