Cuando desperté aun estaba en el avión, no sé qué había pasado con los calmantes, se supone que debería despertar cuando ya hubiéramos aterrizado.
– ¿Cómoda Adkins? – Dijo Simón con un tonó sarcástico. Y entendí porque lo dijo, ya que estaba arrecostada en su hombro. – Creo que dejaste un poco de saliva en mi hombro – Dijo riéndose.
– Que gracioso – Dije acomodándome en mi asiento. – ¿A qué hora llegamos? – Pregunté.
– En realidad no lo sé, mientras tú estabas durmiendo hubieron varios problemas técnicos – Dijo serio.
Oh no.
– Parece que un motor derecho del avión está fallando – Prosiguió.
– ¡¿QUÉ?! – Dije en un grito. Ok ahora si estaba muy alterada.
¡He visto en tv catástrofes aéreas y el final no es bueno!
– ¿Y porque nadie está nervioso? ¿Acaso me estas jodiendo? – Hable rápido, casi no se me entendió por lo nerviosa.
– Nadie sabe lo que está ocurriendo adele, la mayoría tienen sus auriculares puestos, otros duermen. Además conozco a una Aeromoza que me dijo lo que pasaba. – Dijo muy serio.
¡Mierda era cierto!
No podía moverme estaba ferrada a mi asiento, Sentía que iba a morir. ¡IBA A MORIR! Era muy joven… no podía morir ahora, no había encontrado al amor de mi vida, no me había casado, no había tenido hijos. Los cuales siempre les quise poner “Angelo y Angelica” ¿Ahora quien estaría a cargo de louie? ¡No puedo morir! ¡Aun no he conocido a beyonce en persona!
Estaba tan nerviosa, tan asustada, ¡Tan asustada! Que Simón me miraba de reojo y lo notaba.
– Adele, necesito que prestes mucha atención. Escúchame bien, es de vida o muerte. – Dijo Simón mirando a todos lados.
Hasta Aquí llegue… Pensé con mucha seguridad. Hoy moriré.
– Quiero que memorices esto…– Hiso una pausa, con una cara de preocupación. – Todo esto era una broma– Después de haber dicho eso se comenzó a reír y mi sangre estaba hirviendo.
Lo iba a matar.
– ERES UN HIJO DE LA GRAN P…– Antes de que terminará la oración el piloto del avión habló y dijo:
Señores pasajeros estamos a punto de aterrizar, por favor, permanezcan en sus asientos.
– ¡Solo fue una broma! – Dijo entre carcajadas – ¡Tenias que ver tu cara! – Volvió a reír.
Si me dieran cualquier cosa solida en este momento lo golpearía.
– ¡Idiota! – Giré los ojos. – Ya madura – agregué.
Solo le rogaba a Dios que ya fuera viernes por la mañana para no tener que volver a verlo. Era el primer día y ya me quería ir. Genial…
El avión aterrizó, bajamos, esperamos a que nos entregaran el equipaje y un auto nos recogió y nos llevó hasta El hotel en donde nos quedaríamos. En la trayectoria del camino hasta llegar a nuestro destino ignoré por completo a Simón. Cuando llegamos el hotel de verdad que era muy hermoso. Nos bajamos del auto y fuimos hasta la recepción del hotel donde nos atendió un chico con aspecto gay.
– Buenas tardes, ¿En qué puedo ayudarlos? – Dijo el recepcionista.
– Tenemos reservación para dos habitaciones a nombre de Edward Konecki y Adele Adkins – Respondió Simón.
El recepcionista empezó a buscar en la computadora las reservaciones. – Disculpe pero solo hay una reservación de habitación a nombre de Edwar konecki, en la lista no hay ninguna reservación a nombre de Adele Adkins. – Agregó.
– Disculpe, pero debe haber una equivocación, estoy segura de que reservé una habitación en este hotel – Dije con un tono molesto.
– Lo sentimos pero en este hotel no hay reservación a su nombre. –
– Ah no lo puedo creer, lo que faltaba. – Respondí molesta – ¿Y no hay otra habitación disponible? – Pregunté
El recepcionista verifico y dijo – Lo sentimos, ya no hay, en esta temporada hay muchos turistas. –
– Mi habitación es amplia, tal vez…– Interrumpí a Simón.
– ¡Ni lo pienses konecki! – Le advertí.
– Okay… Okay… – Dijo con un tono divertido. – ¿Entonces donde dormirás?, es el único hotel cercano a la zona en donde será la inauguración. –
El muy idiota tenía razón…
– Asegúrate de dormir tres metros lejos de mí. – Eso fue lo último que le dije, el recepcionista me dio la llave de la habitación, la tomé y me dirigí al ascensor. Una vez adentro, las puertas del ascensor estaban a punto de cerrarse cuando Simón las detuvo entrando.
– ¿Pensabas irte sin mi? – Pregunto Simón.
– Eso pensaba – Le contesté marcando uno de los botones del ascensor, el piso 5 para ser exacta.
– Adele, se que comenzamos mal, pero no estaremos así en todo el viaje. – Dijo serio. – Tal vez podamos…– Lo volví a interrumpir.
– Simón vine a un viaje de trabajo, no a hacer amigos – Le dije lo más cortante.
– Sé que estás molesta por lo de la otra vez, de verdad quise disculparme. – Aclaro Simón.
– Simón, no quiero tocar ese tema. – Le respondí.
De verdad no quería recordar lo que pasó.
– Sé que querías que yo…– las puertas del ascensor se abrieron y salí de ahí dejando atrás a Simón ignorando por completo lo que estaba diciendo.
–…Te besara – Dijo Simón terminando la frase. – Pero te besaré algún día adkins…– Dijo saliendo del ascensor.
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Days in the Office ...
Teen FictionAdele Después De Una ruptura en su Relación de cuatro años con Alex Sturrock, ya no creía en el amor. Para ella ya todos Los hombres eran Iguales . Después De Varios años tomo el cargo de la gran Empresa de su padre a pesar de la corta edad Que Teni...