Universidad de Playboys© #2

Capítulo 14

Canción en multimedia: DJ Snake - Taki Taki ft. Selena Gomez, Ozuna, Cardi B.

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Pov Liam

Se podría decir que estoy bien aquí en Londres. Hay buena comida, personas muy amables y lugares preciosos pero hay un único problema, el clima.

No estoy acostumbrado a este clima. Puede que en este momento el sol este en lo alto del cielo y no haya ninguna nube, pero es cuestión de minutos para que empiece a llover, así de raro es este clima.

He salido un par de veces a recorrer la ciudad, puedo decir que hasta ahora mi parte favorita es elLondon Bridge.

No sé porque me da un ligero aire parisino. Sé que las ciudades son completamente diferentes pero es que hay un "algo" que me hace pensar en que todavía estoy en París.

Ya entiendo porque Emma le encantaba este lugar.

Una pequeña punzada de dolor cruza mi pecho al recordarla. Estoy consciente de que ya ha pasado bastante pero aun duele.

Ya he ido a la universidad, es muy grande y hay un montón de áreas verdes para sentarse y estudiar, las clases son muy interesantes y he conocido a muchas personas. Uno de ellos es Preston, él fue quien me dio el recorrido por todo el campus. Él es capitán del equipo de béisbol.

Tuve la oportunidad de ir a verlo en uno de sus partidos y es muy bueno, él fue quien anotó el punto decisivo esa noche.

El olor a quemado me devuelve a la realidad. Abro los ojos como platos y corro hasta el horno, lo abro y el humo empieza a salir. Adiós a mi cena, esto es lo que me pasa cuando intento cocinar.

Estaba tratando de hacer una lasaña pero no funcionó. Me coloco los guantes de cocina y saco mi "lasaña". La dejo sobre la encimera para que se enfrié, luego la tirare a la basura.

Dándome por vencido me pongo las zapatillas y el abrigo, también agarro mis llaves, la billetera y mi teléfono. Iré a comprarme una pizza.

Cierro la puerta y bajo por las escaleras ya que no tengo ánimos de bajar por el ascensor. Cuando ya estoy fuera del edificio busco en el GPS de mi teléfono la pizzería más cercana. Tardo solo 13 minutos en llegar.

Cuando entro el olor a pizza hace que mi estómago gruña a causa del hambre que tengo. Pido una pizza margarita y espero a que mi preciosa llegue. Después de uno minutos ya la tengo frente a mí.

Se me hace agua la boca, si esperar más me llevo una rebanada a la boca y es como probar el cielo. Cuando termino pido la cuenta y pago dejándole propina al mesero.

Cuando salgo me recuerdo a mí mismo el hecho de que debería conseguir algún empleo, así mi madre no tendrá que gastar dinero en mí.

Cuando llego al apartamento tiro a la basura mi triste y quemada lasaña, luego me acuesto en el sofá a ver alguna película que estén pasando en la televisión. De repente mi teléfono suena indicando que tengo una llamada entrante. Me levanto rápidamente y lo agarro. Es mi madre. Deslizo el dedo y contesto.