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Uno de los habituales visitantes fue a contemplarla y su rostro simplemente no mostraba expresión, no se veía ni una pizca de tristeza en ella y solamente se atrevió a decir:

Supongo que era algo que tenía que ocurrir, tarde o temprano...

Fue a contarle al resto del pueblo, la mayoría mostraba expresiones de tristeza o de impacto.

El entierro se hizo el mismo día.

Todos iban bien vestidos y trajeron rosas para ponerla al rededor pero se encontraban con la cabeza gacha.

Llegó el momento de cada uno dar sus lamentos y transcurrió normal hasta que llegó ella.

Seguro te estarás preguntado:

¿Quién diablos es ella?

Y créanme, yo igual tenía esa duda.

Ella era ya de mayor edad, tenía arrugas y el pelo blanco como la nieve y sus ojos eran azules, tenía cara de ser una de las abuelas inocentes y tiernas, que no pueden lastimarte.

Jaja, grave error.

Recuerdo que todos se quedaron estupefactos cuando ella habló

Y todavía me sorprende que recuerde sus palabras

''Esas máscaras que utilizan a diario, ese comportamiento y esas falsas auras de tristezas pueden ahorrarsela, sí de verdad le hubieran tenido un poco de cariño le hubieran demostrado su aprecio, le hubieran dado la luz que necesitaba, la hubieran visto en sus peores momentos y no solo en sus días de color, hubieran estado en la caída de sus pétalos, hubieran estado con ella hasta el final pero ninguno ha cumplido eso, por lo tanto ustedes son la raza más despreciable que puede existir''.

Todos estaban callados, no sabían que decir, ni tenían expresión, podría jurar que hasta se veían pálidos.

Yo solamente tenía una sonrisa en mi rostro.

Desde ese día sabía que ya nada iba a ser igual.

♡Dear Rose♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora