Por EL Beso Que Nunca Te Di

Suicidio

 

 

Capítulo 6

Suicidio

Charles Dickens dijo el sufrimiento a sido mas fuerte que cualquier otra enseñanza, y me a enseñado a entender lo que mi corazón antes era…. E sido movido y mi corazón esta roto….. pero hoy mantengo la esperanza que viene algo mejor.

Espero ser  fuerte para poder entender porque me abandono hace cuatro meses me había dicho que estaba enamorada pero ahora se a marchado de mi lado me a dejado solo por esas estúpidas persuasiones sociales, renuncie a mi trabajo, rompí con leila y le di todo mi apoyo y amor y ahora el hueco de mi corazón es mas grande que el que tenia desde antes de conocerla y no creo resistir mas este dolor.

Despierto sin ganas de otro dia, no lo puedo asimilar, mi alma esta muerta ya, enamorarme de ella fue un espejismo que se torno real, me imagino en la calle muerto cada mañana que me asomo por el  balcón, solo pienso en llegar al final de la forma mas fácil la vida es larga dolorosa y no le encuentro incitante, pero tengo miedo de desir adiós y realmente siento si alguien sufre por mi, pero realmente ya e muerto por dentro estoy cansado ya de una vida de dolor y de mi corazón roto.

Estoy sentado en la barda de un quinto piso y mi dolor y desesperación me empujan hacia la muerte segura y salte un salto lento, se sintió tan bien que parecia que todos mis problemas, desaparecían, y en el impacto sentí que algo amortiguo la caída y rayos si esos costales de aserrín no hubieran estado hay estaría descansando en paz. Pero ahora solo duermo en una cama de hospital un sueño eterno, que me carcomía mi alma.

Cuando abrí mis ojos vi a mi madre a mi padre a leila pero de que me servía si no estaba Naiara, todos lloraban y sinceramente me importaba una boñiga, todos lloraban hacían un escandalo le gritaban a los doctores yo solo serré los ojos intentando volver a dormir para siempre, pero eso no sucedió.

Me hablaban todos, y todos preguntaban tantas cosas, yo no quería hablar, acababa de quedarme paralitico y eso no me importaba, mi madre hablo a solas con migo, al igual que mi padre, mis compañeros de trabajo, y a ninguno, le hable o tan siquiera les ice un gesto, solo desviaba mi mirada hacia la ventana, cuando entro Leila solo me miro, pero a diferencia de los demás, no me miro con lastima, compasión, cariño ó comprensión, sino con decepción, con resentimiento y coraje.

-COMO ES POSIBLE- grito

-eres un egoísta ay mucha gente a tu alrededor sabes, nos preocupamos, porque lo hiciste eres idiota o que porque fue por esa niñita ¿fue por ella? Maldición habla- yo solo escuchaba como gritaba y no dije nada, ni una sola palabra

-esa niñita es una maldita mocosa que no sabe lo que perdió, no te valoro-

-CALLATE- grite ella se quedó pasmada, yo nunca le había alzado la voz y mucho menos la había mirado con tanto rencor.

 Joder me quiero morir