MILK ! kookv.

9.

Taehyung se la pasaba llorando desde el día que vió por ultima vez a Jungkook. Eso fue hace 5 meses.

Su padre le había informado que Jungkook fue mandado a un internado muy lejos de ahí. Y nadie quería decirle dónde quedaba. Era un infierno no saber nada.

El pelirrojo estaba en su cuarto acabando de despertarse al haber tomado una ligera siesta. Abrió sus ojos lentamente, estos ardían tanto y estaba seguro que si se veía en un espejo iban a estar rojos e hinchados.

Escuchó como la puerta fue abierta, suponía que era su padre, ¿quién más? ¿Jungkook? ya quisiera. Volvió a cerrar sus ojos ignorando la persona dentro de su cuarto, desde la vez de la pelea la relación con su padre se volvió distante.

Tae –escuchó como la voz de su padre llamarlo.– Te tengo unas noticias, sé que no estás dormido.

Silencio. No tenía ánimos para hablar.

Es sobre Jungkook. –sus ojos se abrieron y se sentó rápidamente en la cama.–

Bueno, ahí la cosa cambia.

¿Jungkook? ¿Qué pasa con él? ¿Volvió? –sus ojos brillaban y no sabía si eran de ilusión o nuevas lágrimas que querían asomarse.–

Y tal vez. Solo tal vez. Su padre se sintió mal.
Así que solo por eso fue un poco menos directo al dar esta devastadora noticia.

Jungkook... estaba en su cuarto del internado. –su hijo lo miraba atentamente, ¿si quiera respiraba? no se movía esperando saber lo que le pasaba a su amado.– Lo encantraron... muerto.

¿Qué?

¿Había escuchado bien?

El se suicidó, Taehyung... –.

No.

No, no, no.

No, no podía ser cierto, solo era una estúpida, tonta y de muy mal gusto broma para que ya no lo buscara.

Dime que es una estúpida mentira que tú y su madre se inventaron para que deje de buscar a jungkook... –a cambio de eso solo obtuvo puro silencio y un suspiro de su padre quien miraba ahora hacia el piso, no tenía el valor de ver a su hijo a la cara.– ¡Jurame que es una puta broma! ¡Juramelo! –agarró con fuerza las sábanas de la cama mientras sus lagrimas empezaban a bajar por sus mejillas, no podía ser verdad, Jungkook no podría estar muerto.–

No es una broma taehyung –.

Es que no podía creerlo. Se sentía tan irreal, hace tan solo unos meses ellos dos estaban juntos en la cama riendo y dándose besos.

Rompió en llanto mientras escondía su rostro entre sus manos, no podía controlar su llanto, sus sollozos eran tan fuertes que estaba seguro se escuchaban desde fuera de su casa.

Su padre lo miró llorar, observó a su hijo romperse, gracias a él. Por su culpa estaba así. Pero era muy tarde para sentirse así, ya no había más que hacer, Jungkook murió y lo mínimo que podía hacer es decirle el lugar donde iba a ser enterrado.

Su funeral será este fin... te escribiré la dirección para que vayas –.

Taehyung no quería creerlo, es que no era posible, tenía tantos sentimientos encontrados. Estaba tan cansado de llorar. Estaba tan cansado mentalmente, solo quería desaparecer y estar con su bonito novio a solas. Quería estar en sus brazos y oír su hermosa voz.

¿Por qué tiene que ser así? ¿Qué fue el mal que hicieron? Ellos solos se amaban. No estaban haciendo nada malo.

No sabía que hacer, no quería pensar en nada. Deseaba volver a ser un niño e ir a la casa de Jungkook para jugar a los carritos mientras tomaban cajitas de leche.

¿Era mucho pedir?