Confort [BTS/YOONMIN]

Confort

Yoongi suspiró mirando la pantalla de su computadora, llevó su mano hasta su cabello, despeinándolo con algo de cansancio y fastidio; llevaba cuatro horas encerrado en la habitación tratando de arreglar una canción, pero no parecía cuadrar en lo absoluto. Miró la vacía botella de agua junto a su teclado, le dio un manotazo para que cayera al suelo para después pasar sus brazos por detrás de su cabeza, acunándose. Un ruido proveniente del exterior le hizo girar el rostro hasta la puerta, tocaron suavemente y él soltó un gruñido en señal de que podían pasar.

Jimin le miró desde la puerta aun sujetando la perilla, tenía puesta una camiseta que obviamente no era de su talla sino mucho mayor y le cubría parte de los muslos además de las pequeñas manos, estaba descalzo, Yoongi pudo intuir que acababa de llegar al dormitorio por el semblante algo agotado y levemente triste.

-¿Pasa algo, cariño?- le llamó con suavidad, estaba estresado, pero no podía dejar pasar el hecho de que Jimin parecía un poco débil. El chico sacudió su cabeza dando una negativa, su cabello se meneo con el movimiento, ocultando en el transcurso sus ojos, la pequeña mano alejó el cabello y Yoongi pudo ver por un momento un brillo extraño.

-Ven aquí- dijo extendiendo su mano para que Jimin la tomara, el menor se acercó con lentitud, tomando la mano de Yoongi que al instante entrelazó sus dedos, le hizo sentarse sobre sus piernas, era algo extraño casi nunca lo hacía, pero era necesario para encarar a su novio. Ya sentado en sus piernas, con sus manos entrelazadas, Jimin miraba al suelo, moviendo sus pies de forma curiosa mientras el mayor le miraba fijamente, buscando sus ojos. Yoongi suspiró y pasó su mano libre por el cabello de Jimin, apenas hizo un roce cuando el chico se abalanzó sobre él, abrazándolo por el cuello, escondiéndose ahí, respirando profundamente. Yoongi cerró sus ojos, aspirando el aroma dulce que emanaba su pareja, sus brazos en la cintura del menor tratando de apegarlo más a su cuerpo.

Se quedaron un rato en esa posición sin decir nada, sólo sintiendo al otro hasta que Yoongi abrió sus ojos y se dispuso a hablar.

-Jiminnie...- el agarre en su cuello se reforzó, Yoongi estrujó el cuerpo el su menor, sintiéndolo temblar levemente, casi podía escuchar sus latidos, la respiración ajena trataba de acompasarse a la suya, el calor abrazaba su piel. Jimin era tan pequeño, tan cálido, todo de él encantaba a Yoongi. Sin embargo, su pecho aun se comprimía de preocupación, necesitaba mirarlo, hablarle.

-¿Qué pasa?- dijo separándose de él, Jimin miró al suelo nuevamente, manteniendo una de sus manos en el hombro de Yoongi y la otra aun sujeta a la de él. El mayor logró ver a través del flequillo, los ojos cansados y caídos, tristes; los labios apretados y las mejillas coloreadas de rosa. Dejó caer su cuerpo contra la silla, soltó la mano de Jimin para colocarla en el terso muslo, palmeando dos veces.

-Vamos, levántate- Jimin le miró por primera vez, algo sorprendido por el comentario, una sonrisa se extendió en el rostro de Yoongi, gesto que le hizo actuar por instinto a Jimin, levantándose y esperando a que su compañero hiciera lo mismo. El rapero tomó su mano y salieron de la habitación, encaminándose a otra en la que dormía Yoongi, el menor dejó que lo guiara, aunque la duda le hacia sentir inquieto. Ya en la habitación, cerraron la puerta para que nadie les interrumpiera, el mayor se deshizo de los zapatos y se sentó en la cama, acomodándose con la espalda a la pared, extendiendo las piernas.

-Ven- Jimin miró con curiosidad y al principio se sentó junto a él, encarándolo, pero su novio negó con la cabeza y lo atrajo aun más, volvieron a la posición de antes, Jimin sentado en las piernas de Yoongi, esta vez recostando su cabeza en el hombro del otro mientras este los abrazaba y colocaba su mentón sobre la coronilla de Jimin. El silencio reinó unos minutos, ambos quietos, el cuerpo del menor ya estaba relajado y sus ojos se habían cerrado inconscientemente, la silenciosa respiración hacia a Yoongi sonreír, la calma del chico era como la suya, sus sonrisas eran las de él y todas sus aflicciones también.

-Necesito que me digas... ¿estás bien? - un largo silencio le siguió y los ojos de Yoongi se cerraron al sentir el temblor del cuerpo en sus brazos, sus manos se apretaron para sostenerlo, para asegurarse que no desapareciera, para que no se desmoronara ahí mismo, sus manos trataban de mantener unido a todo Jimin, que temblaba por los sollozos. Abrió sus ojos, mirando el techo, tenía que asegurarle que estaba ahí, que ambos lo estaban.

-¿Estas agotado, Jiminnie? Tranquilo, estoy aquí, hyung esta aquí- los sollozos incrementaron, sintió sus propias manos temblar, se contuvo y acaricio los brazos del menor.

-Es cansado, ¿cierto? Está bien, voy a estar aquí para todo... pero por favor, déjame escucharte, háblame- el pequeño cuerpo se separó del suyo y diviso el tierno rostro lleno de lágrimas, la nariz y mejillas rojas, Yoongi acarició su mejilla, limpiando sus lágrimas, le miró fijamente hasta acercarse a besar su frente, bajando por su entrecejo, el puente de la nariz, la punta y sus labios, solo un pequeño beso que viajó por la comisura hasta las mejillas y repitió el proceso. Jimin se aferró a sus brazos y fueron recostándose lentamente.

-Hyung... gracias- murmuró apenas de forma audible, Yoongi sintió que respiraba nuevamente, besó con dulzura el cabello de Jimin que colocó sus manos en el pecho del mayor, cerró sus ojos y se dejó a merced de su novio.

Yoongi pasó sus manos por todo el cuerpo ajeno, acariciando, haciéndolo vibrar de vez en cuando, sus labios paseaban por el rostro del menor. Poco a poco, colocó al chico a su costado hasta que él pudo colocarse encima de su cuerpo; admiró su rostro calmado, acarició el cabello, las mejillas y los labios, sus manos exploraban sus costados, la cintura, la cadera, sin malicia alguna, reconocía su cuerpo, calmaba su piel y besaba cada parte para suavizarla. Dejando que escapara la frustración retenida por tanto tiempo, alejando la fatiga. Sólo teniéndolo entre sus brazos, sólo demostrándole lo mucho que lo amaba.

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Realmente tenía ganas de escribir y esto fue lo que resultó, quería que fuera solo un pequeño momento para demostrar una situación muy típica. A veces las personas necesitan que las abraces y les des cariño, puede que estén reteniendo emociones y saber que tienen a alguien puede ayudarles mucho. Si alguna vez notan a alguien decaído, por favor pregúntenle si todo va bien o si necesitan hablar, denles cariño y háganlos sentir cómodos. Creo que Yoongi es ese tipo de persona con los chicos o al menos eso quiero imaginarme. 

Gracias por leer~