Capítulo XXIV

544 9 2
                                    

- Amor levántate, ya es hora de desayunar - lo movía de lado a lado, pero aún no se levantaba -. Ya verás niño - traje un vaso de agua y le tiré un poco en la cara.
- cinco minutos más - dijo adormilado y con su voz ronca.
- No niño, son las nueve y media de la mañana, no es hora de estar dormido - le tiré otro poco de agua y ahí se levantó.
- Ya niña, deja de tirar agua, ya verás lo que te va a pasar cuando estés dormida - el se levantó de la cama y fue al baño.
- Buenos días niñas - bajé las escaleras y me senté.
- Buenos días Nuni - dijo Lesslie sirviéndo el desayuno.
- Buenos días Lulu - esos eran mis apodos, cada vez que me lo decían yo sólo reía.
- Buenos días hermanas - sentándose al lado mio.
- Buenos días Rafa -dijeron las dos chicas al mismo tiempo.
- Buenos días amor -le di un beso y Karen hizo cara de desagrado.
- Dejen de mostar tanto amor, ya me empalagan - los dos reímos y sólo comenzamos a comer.
- Oigan, ¿Ustedes no escucharon gemidos anoche? - tenía un pedazo de comida en la boca y casi me atragantó con el.
- No - dijo pálida y seca, luego de eso tomé un vaso de agua.
- Ok, creo que sólo nosotras escuchamos - las dos seguían comiendo, Rafa y yo nos miramos y sólo sonreímos.
Paso una semana...
- Oye amor, ¿No tienes algún dulce? - estaba desesperada por comer uno, no se porque, ¿Será un antojo?, ñe.
- Si, aquí lo tengo -me lo entrego y lo comí, pero tenía un sabor raro, como amargo, me lo quité de la boca y le pregunté -. ¿De que es? - el me miró raro y luego me contestó.
- De miel, ¿Por qué? - el me miraba de una forma extraña.
- Es amargo - mire al caramelo con disgusto y luego me lo volví a meter en la boca.
- Pues, como que te falla el sentido de gusto - el soltó una pequeña risa, sólo lo mire y sonreí.
- ¿Quieres ir a un campo? - el dudo un poco, pero al final acepto, le pedí las llaves del auto, llamé a Less y a Karen -. ¡¡Niñas!! ¡¡¿Quieren ir un campo?!! - grité desde la planta baja de la casa y las dos chicas bajaron corriendo.
- ¡¡Si!! - gritaron las dos chicas emocionadas.
- Vamos entonces - salimos de casa y subimos al auto, el campo quedaba cerca de las fronteras, viajaron una hora hasta llegar a su destino.
- ¡¡Ya llegamos!! - dije emocionada.
- Por fin - dijeron los tres hermanos, sólo reí y fui corriendo a la parte de los caballos.
- ¡¡Que increíble!! - dijo Karen acercándose a mí, los caballos eran salvajes, pero casi todos eran domesticados.
- ¿Podemos montarlos? - preguntó Lesslie que venía detrás de Karen.
- Claro - llamé a dos yeguas, las dos eran domesticadas -. ¡¡Princesa!! ¡¡Negra!! - las dos yeguas caminaron con sigilo hasta donde estábamos.
- No son malas - preguntó Rafa asustado.
- No pendejo, pueden ser salvajes, pero jamás serán ariscas. ¿Ustedes quieren montar a Negra? - ellas sonrieron emocionadas, y solo asintieron.- Vengan, les ayudaré a subirse - tuve que agarrar a Karen por las caderas para poder subirla, y luego subí a Lesslie de la misma forma, pero con ella era más fácil, ya que Karen la agarro y la sentó detrás de ella.
- Es increíble, ¿Cómo puedo sujetarme? - le enseñé lo básico para montar a Negra, y luego le dije que vallan por el sendero, que le va a llevar hacía un río.
- ¿Vamos? - Rafa asintió, el me intento ayudar para subir pero ya sabía cómo hacerlo, el se subió agarrándose de mi cintura, subió y silve para que la yegua caminara.
- Porque montar a Princesa, cuando puedes montarme a mi - me sonroje, lo mire de reojo y sonreí.
- Eres un cerdo Rafael - el comenzó a reír, entonces le di unas palmadas en el cuello a la yegua para que comenzara a correr.
- ¡¡___ pará!! - comencé a frenar a la yegua y el me miró, comenzó a hacerme cosquillas y de pronto escuche un aullido, luego me di cuenta que estábamos en un sendero al cual jamás me adentré, mi cara cambió drasticamente, vi a unos siete u ocho lobos hacercandose, me di la media vuelta y le di una pequeña patada para que comenzara a correr.
- Tengo que encontrar a Karen y Lesslie, sus vidas corren peligro - la yegua corría cada vez más y más rápido.
- ¿Qué vas hacer? - Rafa me miró preocupado.
- Tendré que arriesgarme a pelear con esos lobos - Si,  estaba loca como para pelear con una manada de lobos, pero no soportaría perder a Rafa.
- No ____, te matarán - el posó su cabeza sobre mi espalda, suspiro y me abrazó.
- No soportaría perderte amor, tu tienes que encontrar a tus hermanas y advertirles sobre la manada, y luego tienen que venir por mi - el asintió y de un salto me baje de la yegua, Rafa fue por el sendero que le había dicho anteriormente. En eso, mire a la manada y luego vi a Rafa, casi no lo veía, estaba muy lejos, volví a mirar al frente y la manada estaba a unos setenta metros de mi, cuando estaban a unos quince metros de mi, un caballo todo negro se acercó a mi y luego comenzó a correr hacía la manada de lobos, los lobos le mordían las patas y entonces reaccioné, fui corriendo hacia ahí y me tiré sobre el líder de la manada, ya que era el más fuerte y grande. Le mordí la pata derecha y luego le rasguñe el ojo, dejando una cicatriz, sentí como el lobo mordió mi brazo y arrancó un pedazo de el, vi que Rafa, Karen y Lesslie venían a toda velocidad hacía aquí, los lobos al notarlo salieron corriendo, Rafa bajo de la yegua y se acercó hacia a mí, yo sonreí al verlo.
- ¡¡____!! ¡¡No me dejes!! - solo sonreía,y lo único que pude decir fue.
- Te amo Rafael, nunca lo olvides... - lo susurré lo mas fuerte que pude, heché para atrás mi cabeza y solté un suspiro.
Cuándo desperté vi a Rafa recostado al lado mio, con algunas lágrimas en las mejillas  y su nariz algo enrojecida. Bajé mi mirada y tenía una gran venda en el brazo, comencé a examinar la habitación, estaba en un hospital, de eso no había ninguna duda, de pronto siento que Rafa se mueve y pone su cabeza en mi pecho, yo sin dudarlo dos veces comencé a acariciarle el cabello, el se veía que estaba dormido, pero luego de unos minutos despertó y fijó su mirada en mi, el sonrió y soltó una que otra lágrima, y sin pensarlo dos veces me besó.

Si, por esto es que tarde tanto en subirles el capítulo, tienen dos capítulos en uno, no se pueden quejar. Besos🌻

Eres Lo Que Más Quiero ~ Rafa Polinesio y Tu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora