Era una noche especialmente fría, de un cielo despejado. La luna se cernía con todo su esplendor sobre el castillo de la colina.
El viento arreciaba contra las ventanas de la vieja edificación, pululando cual aire huracanado.
Él salió sin inmutarse de los ruidos del exterior, la oscuridad que se cernía sobre el castillo daba a señalar que eran altas horas de la madrugada. Pero a él no le importaba, el tiempo había pasado a ser algo banal, carente de valor, se acercó al tocador y recogió sus aterciopelados guantes blancos; los colocó con rapidez y agilidad sobre sus finas manos de dedos alargados, mirándose al espejo, cogió su sombrero de copa alta y lo colocó sobre su cabeza . En ese mismo momento, justo bajo sus pies: en el Hall la puerta principal fue abierta, asomó por ella la cabecita de una chica, cuya edad debía rondar por los 14, que miró con ojos curiosos mientras estrechaba el libro " Twilight" contra su pecho. Movió la cabeza de pelo castaño recogido en una coleta e inspeccionó rápidamente el interior del castillo para asegurarse que estaba sola. Entró con rapidez y se recogió el rebelde mechón de pelo que había resbalado hacia la frente.
Ella se llamaba Missi, y comenzó a caminar dando pasos frágiles; como si tuviese miedo de hacer ruido, tras ver que no pasaba nada, se recostó con confianza tras unos de los muros del pasillo de la entrada y colocando su mochila en el suelo: comenzó a leer.
Él había cogido su bastón, cuya empuñadura era la estatuilla de un murciélago, y comenzó a bajar las escaleras. Conforme bajaba: notó en el aire un olor peculiar, sus escuálidas piernas bajaban los escalones hasta llegar a la puerta del piso que daba al Hall. Reconoció ese olor: era el de un humanoMejor dicho
De una humanaElevó su bastón, que levantó su empuñadura por la que salieron esferas de fuego que volaron hacia los candelabros para iluminar la estancia.
Missi levantó la vista, desconcertada, y se puso rápidamente de pie al ver que el Hall del castillo que ella había creído abandonado, se iluminaba.
Entró en un estado de estupor, y lo único que le hizo mirar hacia arriba fue una gran ráfaga de viento que cruzó la sala, procediendo de la puerta del piso de arriba, protegida tras una barandilla.
Él se acercó a la barandilla y observó con deleite la cara de estupor de la chica: Duke hacia años que no veía a un ser humano, de hecho, hacia siglos que no veía a nadie.
Sonrió, mostrando sus afilados dientes blancosEstaba eufórico, por fin tenía algo con lo que divertirse!
Por fin algo rompía con la eterna monotonía de su existencia en el castillo. Lleno de una alegría sádica: comenzó a cantar ante su presa:- The day is the wife whom I elude
The one to whom I should be right
Although forewarned by peers and kin
I always get into the night
Mother always warned me such
Being a nocturnal soul
Besides just being simply strange
Spawns from some illness of the mindMientras cantaba con una voz melodiosa y atractiva, se acercó a la barandilla y saltó hacia el piso de abajo, aterrizando correctamente de pie, Duke le dedicó a Missi una sonrisa pícara
Comenzó a caminar con galantería hacia una petrificada Missi, oteando su capa al viento y columpiando su bastón
..... the night, she calls me
She calls me, she calls me
She calls me, she calls me
She sways in her velvet dress
And pulls me towards her in the dark
While the others restUna vez estuvo delante de ella, se inclinó y comenzó a menear sus hombros al ritmo de la canción. Duke estaba claramente disfrutando el momento, este cogió su capa y tapándose con ella: desapareció de la vista de Missi , apareció pocos segundos después detrás de ella, como si fuera una sombra
Missi comenzó a girar para ver a donde se había esfumando; aprovechando la oportunidad; Duke surgió justo detrás de ella provocándole casi un susto de muerte. Missi, que para entonces ya había advertido el peligro que corría, comenzó a correr hacia el interior, en dirección contraria a la puerta de salida.
Duke fue mucho más rápido y en un abrir y cerrar de ojos se le adelantó e impidió su paso, siguió danzando frente a ella y con un movimiento de su bastón lanzó el libro de Missi varios metros hacia atrás.
Twilight cayó al suelo y, por obra de Duke, sus páginas se hicieron trizas.
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The Night ( Missi y Duke)
Short StoryAdaptación en modo de historia corta del cortometraje de Daria Cohen conocido como " The Night". En esta historia escrita se narra paso por paso la desventura de Missi en su fatídico encuentro con un destino incierto que le esperará en el momento e...