•01

4.2K 272 75
                                    

Sus aún pequeños colmillos continuamente le molestaban, lastimando le sus labios. Su madre, Krul Tepes le aseguró y aconsejó que es normal aún siendo un vampiro menor todavía en crecimiento que le moleste ciertas cosas físicas de un ser Inmortal. Pero que con el tiempo se acostumbrará bastante bien y sabría cómo manejarlo.

Mikaela Tepes, un niño de doce años que aparenta nueve—un gen bastante normal en los vampiros es que aparentan ser muchos más jóvenes de lo que en realidad son, un ejemplo es su madre, que parece una chica de quince años cuando posee más de 1,500 años—, viene de una familia de la alta realeza entre los vampiros, siendo temidos y respetados por casi todas las especies del mundo.

Un mundo donde viven en paz entre las que tres diferentes especies habitan. Vampiros, seres humanos e híbridos de aves. El 70% del planeta son humanos, el 25% vampiros y el 5% son los híbridos de raíces de aves. Y no solo es la raza en las que se dividen, también en castas sociales.

Alfas, Betas y Omegas. Aquí no se menos precia a ninguno de éstos, aunque haya gente machista que todavía tenga el pensamiento antiguo de que los Omegas solo sirven para mantener en orden la casa, cuidar a las crías y satisfacer a su pareja. Ya sea Alfa u Beta.

Regresando a Mikaela, aparte de su madre el único otro familiar que tiene es su tío Ferid. Un primo lejano de su madre, un noble. Su padre falleció poco después de nacer. Él nació de dos Alfas. Su tío es un Omega un tanto presuncioso que parece pedófilo y mantiene una íntima y casi secreta relación con un tal Crowley. Otro vampiro de cabellos rojizos.

Ahora, alejándonos de su origen, Mikaela Tepes se encuentra esperando ansioso, sentando en un tronco de árbol a alguien especial para él.

Yuuichiro Ichinose. Un niño de cabellos negros y hermosos ojos esmeralda de tan sólo ocho años. Un poco más bajo que él.
Yuuichiro es de ese 5% de la población que es híbrido. Posee dos pequeñas alas de cuervo.

Lo había conocido un mes atrás, cuando unos niños se burlaban de él e intentaban humillarlo y golpearlo por ser un feo vampiro. Claro, los infantes no sabían a que familia pertenece ya que después de todo aún desconocian sobre las grandes y poderosas familia, y el valor de los apellidos.
Yuuichiro, sin saber más que es un joven vampiro en problemas lo defendió de los otros y huyó con él sin dificultad alguna. Desconociendo por qué extrañamente el pequeño vampiro no se defendió al poseer fuerza y velocidad un tanto superior a la de aquellos infantes. Quizás conociendo su propia fuerza no quería perder el control y herirlos a pesar de lo malos que fueron con él.

A está edad, el Tepes no es verdaderamente"feo". Solo un poco rellenito, cabello maltratado, lo revuelto y con unas notorias ojeras. Pero a los niños les parecía un indefenso tonto nerd. Para su suerte, conoció a Yuuichiro. Una vez se alejaron y comenzaron a platicar, el vampiro quedó enamorado perdidamente del azabache. Ya de por sí su belleza natural lo había atraído bastante, quedó encantando con su personalidad y pensamientos.

Mika no sabía si el azabache podía ser Omega, Alfa u Beta. Acomparacion de los humanos o híbridos, los demonios y vampiros saben una edad más temprana a que casta pertenecen, por lo que el rubio de ojos azules ya sabe a qué jerarquía pertenece.

—¡Mika!¡Mika!— una infante y adorable voz lo sacó de sus profundos pensamientos.

Su Yuu-chan había llegado.

—Yuu-chan, te he esperado.— le sonrió al pelinegro que tomó asiento a su lado.

El pelinegro desconocía de que familia viene él, solo sabe su nombre, que es un vampiro y unas cuantas cosas sobre sus gustos y cosas típicas de amigos. En cambio Mikaela, sabía que Yuuichiro es hijo de un Beta y un Omega. Un poco pobres. El Beta, Guren Ichinose, trabaja en el ejercito y recibe un sueldo promedio que apenas alcanza para todas las necesidades de su humilde familia. Guren es un híbrido, igual que yuu posee dos alas de cuervo pero más grandes y fuertes. El Omega, Shinya es un humano albino que se retiró del ejército para ayudar en casa y cuidar todo el tiempo a su pequeño hijo. Pero no solo era un amo de casa, también se dedica a su trabajo de medio tiempo para ayudar en los gastos familiares. La información de todo aquello la consiguió al pertenecer a una alta familia de la sociedad con demasiado contactos.  No le preguntó directamente al menor por qué esté querrá saber más sobre él y temía de que podría pensar de él. Alguien de la realeza que no pudo defenderse y "feo". Además que él quería ganarse el cariño y amistad del híbrido por el mismo sin que su apellido tenga algo que ver.

"Familia"-Omegaverse-MikaYuuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora