Amor Mio

Capitulo 5

*A partir de ahora haré publicaciones semanales, así que les voy a pedir que compartan la historia, comenten y lean, eso es lo que me motivará a seguir" 

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"— Ahora se a que se refería Ren... — murmuó el castaño para sí mismo aunque Aichi logró escucharle, ¿Acaso eso había sido solo una prueba para el mayor? pensó el menor, este quería comprobarlo, decir algo al respecto, mientras el castaño también quería explicarle sus palabras y sus acciones pero entonces los demás llegaron con la comida. El ambiente se había deshecho y el castaño volvía al rincón de la habitación con una sola pregunta en la cabeza. «¿Por qué no lo había besado antes?»"

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El tiempo que duró esa primer visita fue bastante corto a pedido del doctor, los exámenes no estarían listos hasta el día siguiente y Aichi debía permanecer en observación durante ese tiempo por si legaban a surgir nuevos dolores o síntomas. 

Los chicos se despidieron de la fomra más alegre posible dadas las circunstancias antes de partir, Kai salió junto a los demás pero se quedó al lado de la madre del joven mientras los demás se retiraban del lugar, el no pretendía irse de allí, tanto por la familia como por el joven que estaba internado en esa habitación. La mujer, ahora con una expresión agotada, se sentó en una de las bancas del pasillo y el joven se sentó a su lado, estaban los dos solos pues su pequeña hija fue llevada a casa por Misaki quién se ofreció a cuidarla luego de que el gerente dijera que ese no era un buen lugar para que la niña descansara. 

  — El estará bien...—  murmuró el joven mientras seguía mirando la puerta de la habitación. —  Ha vivido muchas cosas, el no es de los que merece pasar por algo así, pero si le corresponde sé que podrá superarlo. —  La mujer a su lado le regalo una sonrisa suave al escuchar eso, sabía por conversaciones con su hijo que el joven a su lado no era de los que hablaba demasiado, por lo que aquellas palabras tomaban más peso todavía. 

— No se si intentas convencerme a mi, o a ti mismo joven Toshiki, pero tengo la seguridad de tus palabras... Así que te lo agradezco... —  Con eso ambos dieron por finalizada la conversación. Durante el resto del día y parte de la noche ninguno dijo nada, sin ánimos de comer o beber Kai supuso que la persona a su lado estaba igual y la razón se la llevo cuando la mujer se negó a moverse del lugar ante el pedido de una enfermera. A altas horas de la noche, y tomando en cuenta la situación una de las enfermeras permitió el ingreso de ambos a la habitación, acomodando un par de sofás para el descanso de los visitantes  con la promesa de no molestar al chico quien se había quedado dormido nada más ellos retirarse hace bastantes horas. 

Al entrar a la habitación y acomodarse cada uno en un sillón Kai dirigió su vista al joven dormido tan solo por unos segundos antes de retirar la mirada y dejarla en sus manos. Se veía demasiado frágil, demasiado para no estar seguros de lo que el chico tiene y demasiado para alguien que expresaba su alegría y amabilidad la mayor parte del tiempo, estaba seguro que esa noche el no iba a poder dormir, pero se alegró un poco al notar como la mujer lograba descansar al igual que su hijo. 

  — Ngh... —  Al pasar las horas, el peliazul se despertó, por unos momentos sin saber en donde estaba hasta que quitando la pereza de sus ojos pudo observar su alrededor, no había sido un mal sueño, en verdad estaba en el hospital.  Dejó salir un suspiro al pensando que las dos personas presentes, que apenas alcanzaba a ver de reojo, estaban dormidas. — ¿Cómo te sientes Aichi? — La voz del castaño causó un ligero susto seguido de un rubor de parte del joven pues el beso del día anterior se hacia presente en su mente, no podía creer tampoco que el mayor se hubiese quedado toda la noche junto a él. 

  —  Estoy... Estoy bien... Al menos eso creo, no me duele nada y el mareo que tenía de ayer se me ha pasado. —  Habló en voz baja, su vergüenza y el hecho de que su madre aun dormía le obligaron a ello. El joven solo asintió antes de sentarse en el sofá, se había recostado en algún momento de la noche aún sin dormir. —  Pronto llegarán tus exámenes... — esta vez fue el turno del chico de asentir, bajo la mirada y jugo con sus manos un poco antes de atraverse a preguntar lo que rondaba en su mente en ese instante. —  Kai... ¿Por qué me besaste ayer? —  Rogaba que no fuese por lastima, el tenía sentimientos de índole amorosa hacia le castaño, pero siempre se repetía a sí mismo que algo así no ocurriría, ahora con ese beso no sabía que pensar y era una de las peores sensaciones, además claro que la posible enfermedad que podría tener. 

El castaño se tomó unos segundos para pensar una respuesta, si no quería hablar estaba seguro de que el chico en la camilla lo respetaría y no preguntaría más al respecto, sin embargo, esta vez no estaba dispuesto a ello, se había cansado de mantener toda su vida en un limbo de secretos y sentimientos guardados. — Quería comprobar mis propios sentimientos Aichi... Ren... el mencionó que mi atracción hacia ti era muy obvia, me tomo mucho tiempo el decidirme a algo y... cuando perdiste el conocimiento en la tienda no hubo forma de negar mis sentimientos, no estoy diciendo que voy a empezar a salir contigo ni nada de eso, hay cosas más urgentes que resolver como tu salud, así que por ahora no debes pensar en ello. — El peliazul observaba al otro con una clara expresión de asombro, Kai no era de las personas que mostraban sentimiento y menos que hablarán tanto... sin una buena razón claro, y esa parecía ser una buena.  Sin embargo, antes de el dar su respuesta, de decirle al castaño que el también sentía algo hacia él, uno de los doctores entro seguido de una enfermera. Aquella interrupción causó que la madre se despertara también y los chicos prestaran atención a las manos del hombre pues en ella traía lo que supusieron eran los exámenes del menor. 

—  Lamento la interrupción a su descanso. —  Mencionó el hombre al entrar, todos negaron aquella disculpa. —  Bien, los exámenes del joven Aichi los hemos tenido que repetir un par de veces, esto debido a que aquello que aparecía era algo un poco inusual, sin embargo no tenemos duda de ello. —  Aichi empezaba a ponerse algo pálido, Kai se levantó y tomo la mano de este, su madre hizo lo mismo para darle algo de calma.  — El joven Aichi no tiene cáncer en su cuerpo, los exámenes a esto salieron negativos.  —  El aire contenido por todos salió en una exhalación, pero antes de poder sonreír el medico continuó. — Sin embargo, encontramos una anomalía en el cuerpo del joven pues el cuerpo extraño que hallamos dentro tiene una severa similitud con el órgano reproductor de la mujer, los exámenes fueron repetidos por este motivo, no parece que aquello fuese a afectar su salud pero debemos estar seguros. — Eso dejo desconcertados a todos, pero el alivio seguía allí, algo así era mucho más llevadero que una grave enfermedad. 

  —  El joven puede volver a su casa el día de hoy, sin embargo hasta conocer el estado completo de este le suministraremos un par de medicinas y recibirá controles pues el dolor ocasionado no fue natural para el cuerpo del joven. Señora Sendou por sigame para firmar los documentos de salida del joven. —  La mujer asintió y antes de salir dio un beso en el afrente de su hijo, de nuevo Kai y Aichi quedaron solos en la habitación.  

  — Asi que... Estoy bien, menos mal, no me hubiese gustado preocupar más a mamá... — La sonrisa del chico recuperó su forma habitual en ese momento. Kai le miró impresionado y dejó salir una suave risa. — Solo tu piensas eso cuando el enfermo eres tu... Daré la noticia a los chicos, de seguro ya deben venir en camino... si te parece bien solo les diré que estás libre de peligro, lo otro puedes contarlo cuando lo consideres pertinente. — El menor dejó salir una risa mientras sus mejillas se tornaban rojas de nuevo, Kai lo conocía muy bien y estaba agradecido por ello.  

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*Bueno, bueno, aquí le dejo el Cap, ya deben saber por donde va el río XD basicamente la idea es la consciencia de que si cabrón Aichi puede darte hijos (?) ya en el otro capitulo pondremos algo más de romance, aquí fue una confesión al estilo Kai... jajajajajajaj Bueno, la otra semana, el lunes publicaré el siguiente cap, no olviden compartir, votar y comentar.