La Propuesta Oficial || lunamist » vonlane

Capítulo 8

Tsunade se sentó, recostandose en su silla, esperando. Kakashi trajo a Sasuke hace unos minutos antes y, aparte de los saludos iniciales, no se había dicho nada más. Tsunade le había pedido a Kakashi que se quedara, y ella sabía que Gai y Nara Shikamaru estaban en la pequeña habitación que Shizune normalmente ocupaba, justo al lado de su oficina. Solamente esta habitación no estaba protegida de la barrera acústica que había colocado al tomar su posición de Hokage, permitiendo a ambos Jounin tener acceso completo a lo que se decía en su oficina. Ellos sabrían si y cuando fueran necesarios. Ocultando sus chakras, Tsunade dudó que Sasuke supiera que estaban allí. Sin duda se imaginó que alguien estaba cerca, pero no quién.

La Hokage había estado tratando de leer algo de la postura, los ojos o la expresión facial del Uchiha, pero al igual que tantas otras veces, la apariencia de Sasuke era de aburrimiento desinteresado, su rostro era una máscara de indiferencia. Alguien más podría haberlo encontrado ofensivo, pero Tsunade sabía que era uno de sus mejores mecanismos de defensa. Sacudiendo la cabeza, la Hokage sabía que no daría nada.

—Uchiha, ¿sabes por qué quería verte?

—No.

—¿Sabes por qué le pedí a Hatake que fuera por ti?

—Solo puedo asumir que es porque esperas tener que someterme, que realmente lo crees capaz de hacer.

El ojo de Tsunade se contrajo. El mocoso tenía razón. Incluso con Kakashi, Gai y Shikamaru, en realidad sostener a Sasuke Uchiha sería casi imposible. En verdad, el único lo suficientemente fuerte como para tener una oportunidad contra él era Naruto, y. . . bueno, él era la única persona que no estaba disponible actualmente.

—¿Realmente no tienes idea?

Sasuke gruñó. —Che- no diría exactamente eso.

—Entonces, al menos tienes una teoría.

—Solo puedo pensar en un idiota que te incite a intentar algo tan estúpido.

El puño de Tsunade hizo contacto con su escritorio, dispersando papeles por todas partes. —¡No lo llames idiota! Naruto está lejos de ser estúpido.

La ira no sorprendió a Sasuke tanto como lo hizo la defensa de Tsunade de la inteligencia del dobe. La había escuchado llamar a Naruto un idiota en más de una ocasión. Tsunade estaba definitivamente a la defensiva, y más concretamente, estaba protegiendo a Naruto. Protegiéndolo contra Sasuke. Un miedo frío comenzó a formarse en el hoyo de la barriga de Sasuke, saliendo al resto de su cuerpo. Algo andaba mal. Muy mal.

—Hokage-sama, ¿Le ha pasado algo a Naruto?

El cuerpo de Tsunade se relajó ante el tono en la voz de Sasuke. Era el mismo que había usado cuando solicitaba la mano del mocoso en matrimonio, la razón por la que ella había estado de acuerdo en primer lugar. Tal vez, solo tal vez, no tendría que involucrar a Gai y Shika más de lo que ya estaban. Inclinando la cabeza hacia un lado, Tsunade le dio a Sasuke una mirada evaluadora. —No estoy segura, por eso estás aquí.

Sasuke estaba empezando a irritarse. —No entiendo.

—Bueno, entonces, eso nos hace dos. Dime lo que pasó.

—¿Cuando?

—¿Por qué no comenzamos con la mañana en la que le conté a Naruto sobre tu solicitud y nos dirigimos a partir de ahí?

Las manos de Sasuke se hicieron puños. —No tenemos tiempo para esto. Si Naruto está en problemas-

—Él está a salvo por ahora. Lo tengo en una misión personal, así que ya ves, tenemos tiempo. Desde el principio, Uchiha.