Querido ojos café:
Hoy estabas extraño.
Mejor dicho, yo estaba extraña.
Hablaste sobre todo y a la vez sobre nada.
Dijiste que tu día estuvo mal pero no quisiste hablar de eso.
Me resigné a no insistir pero creo que debí haberlo hecho.
ESTÁS LEYENDO
Ojos café. (1)
General FictionTus ojos eran café, y no había forma de escapar de ellos.