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Eren sentía la lengua de Erwin en su boca.

Sus lenguas jugueteaban.

-Mmh...-Eren subió una pierna hasta la cintura de Erwin.

El rubio la tomo para acariciarla.

Eren se estremeció, sintiendo un agradable escalofrío en su espalda.

-Tus labios...-Comenzo a besarle el cual lo al castaño-Son deliciosos...-

-Aaah...-Se estremeció-Erwin...-Sus manos se deslizaban por la espalda del rubio.

Erwin tomo ambas piernas de Eren y lo elevó, apoyando el cuerpo del castaño contra la pared.

Las piernas de Eren rodearon la cintura de Erwin.

Sentía como su cuerpo ardía, como cada cálida caricia lo derretía, lo hacía sentir bien.

Los besos intensos que lo hacían suspirar, ni si quiera considero la falta de hablar, no era necesario una palabra, solo con mirarse a los ojos sabían que era lo que cada uno quería.

Era algo que Eren nunca había sentido.

Ese deseo de besar, ese deseo de sentir, el deseo de ser querido y amado.

Saborear los labios de Erwin, sentir lau lengua intrusa en su boca, sentir las manos juguetonas acariciando su piel de una forma delicada.

-Eren...-Lo miró a los ojos-Eres hermoso...-me susurró en los labios-Eres una gran persona... Eres increíble...-Bajó las piernas del castaño-Vamonos de aquí... Por favor...-

-Si...-Asintio.

Caminaron hasta la salida y antes de irse, se dieron un beso, para luego subirse al automóvil de Erwin.

Eren tenía una gran sonrisa en su boca.

Olvidando la hora, olvidando su hogar, olvidando a su pareja por completo.

Le gustaba sentirse de esa forma.

AMISTAD, AMORES Y ENGAÑOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora