Capitulo 1

9 1 0
                                    

1 de noviembre, era jueves y mis amigas estaban emocionadas por la fiesta del viernes, como cualquier adolescente, claro, tan solo faltaba una semana para graduarnos del colegio y queríamos tratar de pasar juntas todo el tiempo posible antes de que acabara el año y tuviesemos que separarnos, porque desgraciadamente cada una tenía que irse del pueblo para ir a la universidad lo cual significa que estaríamos lejos, separadas, en distintas ciudades para realizar nuestras vidas. Además nos ibamos a extrañar demasiado porque apesar de nuestras diferencias siempre estabamos las unas para las otras, sin importar qué, siempre nos escuchabamos.

Devy, por ejemplo era la que nos aconsejaba de un manera muy directa, es decir, demasiado realista, pero a ella no le importaba decir lo que pensaba con tal de abrirnos los ojos, así fuese de una manera dolorosa.

Por otro lado estaba nuestra querida Wen, siempre tan tierna y amorosa (notese el sarcasmo) realmente es una de las menos afectuosas, la mayoría del tiempo no demuestra sus sentimientos, pero apesar de todo tiene sus virtudes, Wen siempre nos escuchaba, así le contaramos lo mismo una y otra vez.

Amber era la que trataba de entendernos, para así aconsejarnos.

Ema siempre nos hacía reir con cualquier frase que saliera de su boca, siempre nos alegraba el día, pero cuando su estado de ánimo no era el mejor, todas estabamos para hacerla reir, sin tener en cuentas nuestros intentos fallidos y malos chistes.

El idioma oficial de Irina era, sin dudar, el sarcasmo, hablaba así todo el tiempo, ya ni nosotras distinguimos qué decía enserio.

El estado de ánimo de Perla cambiaba constantemente, por cualquier cosa y dramatizaba la situación de una manera impresionante, eso siempre lo veíamos con gracia, por esta razón se enojaba, aunque no era raro que lo hiciera considerando su dramatismo.

Amanda era muy sobreprotectora, todo el tiempo nos cuidaba, en cualquier momento que la necesitaramos ella estaba.

Y yo, bueno, soy un poco de todas ellas, pero con la timidez incluida, también estoy para ayudarlas, aunque a decir verdad todas estábamos para todas, teníamos secretos como cualquier grupo de amigas y nuestros desacuerdos, sin embargo después de todo nuestra lealtad estaba siempre por delante, nos defendíamos y protegiamos unas a otras, si la gente se metía con una las otras salíamos al ataque.

S.O.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora