El Inicio de las clases

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Por lo general Alice debía perseguir a Alex para que le ayudara a ubicarse en la inmensa escuela, Alex siempre se sentaba a su lado en clase pero nunca le hablaba por lo que Alice recurria siempre a conversaciones entre clases con Alexa o inclusive en la hora de salida antes de ir a casa:

-Alice ¿Qué te pasa? te noto muy callada y distante con Alex,, ¿A pasado algo malo entre ustedes?

-No... solo es que... no lo se.. me duele que me ignore es como si sintiera algo por el que no puedo expresar ... entendería si tu no me comprendes en esta ocación Alexa ya que ni yo misma me entiendo..

-Tranquila Alice todo se va a arreglar y si sientes algo por el pero el no demuestra lo mismo por ti encontraras a alguien mas no te calientes la cabeza con preocupaciones como esas, además tu aun no conoces muchas personas aqui en California, eres una chica muy dulce tierna, encantadora y muy bonita solo mirate...- lo cual era muy cierto, Alice tenia unos brillantes ojos color miel, su cabello era  marron dando tonos de dorado, era alta, no muy delgada y su piel era blanca- te ayudaré a conocer mas gente Alice, no te angusties ok?.

-No lo se Alexa, no estoy segura de que funcione porque...- Demasiado tarde, Alexa ya se había ido con su novio Ryan, si es que no se equivocaba.

Alice terminó de guardar sus cosas en su locker y justo cuando se dió la vuelta chocó con un chico al que no había visto por el colegio, aunque claro no le sorprendió ya que no conocía mucha gente, este pequeño choque había logrado dejar caer la mochila de Alice y todas sus cosas salieron volando.

-Oh lo siento dejame ayudarte- el joven comenzó a recoger sus cosas y poco a poco lograron recoger el desastre.

-Gracias pero debí haberme fijado lo lamento mucho.

-Tranquila no tienes que disculparte... mi nombre es Drake, Drake Carter

-Un placer mi nombre es Alice Grant

-Tu eres nueva no?

-Si si lo soy

-Ya decía que nunca te había visto por aquí, de donde vienes?

-Oh yo vengo de Florida, mi madrina consiguió empleo aquí en California por lo que nos mudamos..

-Tu madrina? no vives con tus padres?

Alice no soportó la pregunta y una lagrima rodo por su rosada mejilla al responder: -No... Lamentablemente no.. mis padres fallecieron hace 3 años por eso vivo con mi madrina.

-Oh lo lamento... no debí haber preguntado- saco un pañuelo y él mismo secó sus lagrimas

-No no hay cuidado tu no sabías.. gracias

-Te acompaño a casa?

-Claro si tu deseas lo agradeceré infinitamente

Apenas salieron del cole se encotraron con alguien que portaba su mismo uniforme.. y quién tenía que ser... era nada más y nada menos que Alex, Alice no le dió importancia ya que obviamente si no le hablaba en clases mucho menos fuera... o acaso se equivocaba... inmediatamente Alex se acercaba a ellos, los nervios de 0 a 100 en un segundo, a que se debía tal misterioso encuentro?

Pero claro nada bueno es eterno, cómo pudo imaginar que Alex se acercaba a ella? el solo paso rozándole el brazo para poder hablar con Drake y como siempre la ignoraba y apartaba de su vista.

No...no seguiré soportando esto porque mortificarme si me habla o no esto termina aquí...- 

-ALEX! CUÁL ES TU PROBLEMA...-  este se volteó asombrado de tal actitud en Alice y se acercó a ella..

- QUE CUÁL ES MI PROBLEMA?, EN SERIO QUIERES SABERLO?

-SI... NO SOPORTO MÁS LA DUDA ME TORTURA, DESDE EL PRIMER DÍA ME IGNORAS SIN NINGUN MOTIVO!

-TU CREES QUE ES FACIL HABLARTE... MIRATE ERES PRACTICAMENTE LA MEJOR AMIGA DE MI HERMANA ... COMO HABLARTE SI CADA VEZ QUE TE VEO SE ME VAN LAS PALABRAS...

-A ..A QUE TE REFIERES CON ESO?

- NADA, OLVIDALO- inmediatamente tomó un sobre de la mano de Drake y se fué a su casa dejando a Alice con aquella duda en su mente, A que se refería con "cada vez que te veo se me van las palabras" pero en ese instante Drake interrumpió sus pensamientos...

-Alice, te encuentras bien?

- Si, podemos seguir caminando, necesito llegar a casa- De nuevo emprendieron su rumbo a la casa de Aliceal llegar drake se despidió de Alice y ella entró a su casa aún con aquella duda en su mente, sin darse cuenta realmente de lo que hacía, llegó a su habitación se cambió de ropa por unos jeans con una blusa rosa pastel y unas sandalias de color cobre, terminó sus tareas para la hora de la cena, su madrina siempre llegaba tarde por lo que era costumbre cenar sola, concluyo su cena y se fue a cambiar por su pijama, se lavó los dientes e intentó dormir teniendo siempre presentes las palabras de Alex en su mente...

Tu presenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora