El club de los rechazados.

~Prólogo

Archivos: nombres y características ♥

Nombre: Rubén Doblas.

Edad: 25 años.

Observaciones:

Hace unos días noté que usaba guantes, eran de color negro y eran de algún material parecido al cuero, su ropa estaba un poco quemada, tal vez había tenido un accidente, pero no supe con certeza qué le había pasado. Luego, otro día, él salvó al profesor de que la lámpara le cayera en la cabeza. Unas horas después, dijo que saliéramos del salón de química porque Andrés explotaría su compuesto químico; nadie le hizo caso, es más, se burlaron. Andrés es el más inteligente, pero..., sucedió. Todo el salón quedó bajo una nube verde con olor a huevo podrido.

Decidí seguirlo hace una semana, siempre se sienta solo en la cafetería, toma las cosas con mucho cuidado, y evita tocar cosas de madera o papel.

Ayer lo vi sentado detrás de los árboles de la escuela con un encendedor en la mano, no sabía que fumase. Pero no tenía cigarrillos, solo jugaba con el pequeño objeto negro, lo movía nervioso, hasta que se sacó los guantes de las manos. Sus manos estaban perfectas, no tenían huella de lesión,y estando en pleno verano, no había motivo para que llevara tales prendas. Miró hacia todos lados, afortunadamente no me vio, suspiró e hizo que la llama del encendedor apareciera. Al principio era pequeña, luego la acercó a sus manos y estas se incendiaron, pero no se quemaron. Rubén se veía asustado, pero no dejaba de ver las llamas, las cuales iban cambiando de colores; rojo, azul, verde, amarillo, naranja. La llama crecía y se hacía pequeña, bailaba sobre sus manos, y no le quemaba la piel.

Pude haber observado más pero mi pie rompió una rama y tuve que irme antes de que me viera.

Mañana le dejaré la nota en su casillero. Será de tela, para que no la queme.

Nombre: Alejandro Bravo.

Edad: 22 años.

Observaciones:

El tipo más gruñón que he visto en mi vida. No puedo creer que tanta amargura quepa en un ser tan... pequeño.

Igualmente siempre está solo, no creo que sea por su mal humor, la gente parece hacer lo que él quiere. Puede ser... No, no tengo pruebas, aún.

Los días que no observé a Rubén, observé a Alejandro. Siempre está con un chico, al cual también debo observar. Se juntan cada día en casa de ese chico. No sé su nombre pero tiene linda sonrisa.

En una ocasión, Alejandro le pidió al chico que no pensara en nada, que pasara lo que pasara confiara él. El otro aceptó. Alejandro lo miró fijamente, y él abrió los ojos. Sus pupilas estaban dilatadas, daba miedo. Alejandro hizo que se parara en sus manos. Luego lo obligó a hacer una voltereta. La nariz de Alejandro empezó a sangrar y el otro chico cayó al suelo atontado y asustado. Alejandro se fue y casi me ve.

Mañana le dejaré una nota en su casillero. Espero no haga que alguien más la lea por él.

Nombre: Frank Garnes

Edad: 22 años

Observaciones:

Es el amigo de Alejandro, los he visto muy unidos siempre. Pero hay ocasiones en las que él se encuentra solo. Lo oí murmurar que no estaba su libro, que lo había olvidado en casa, al segundo siguiente lo tenía en sus manos. Pensé que era cosa mía, hasta que pasó el incidente de la casa de Frank. Simplemente desapareció. Me quedé pasmada, hasta que lo vi mirando por la ventana de su habitación. Mmm... Trasmutación.