Audición

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Me sudaban las manos, era la competidora numero 1356 de la nueva edición de X Factor Inglaterra. Realmente no sé en qué momento hice caso a mis compañeros de trabajo de que tenía una buena voz.
Estaba sentada con mi ukulele en mano, era la siguiente. Veía a través de la pantalla como Simon estaba destrozando al joven que estaba ocupando el escenario en ese momento. No era el mejor cantante, pero Simon estaba desatando toda su furia.

Simon estaba más duro que antes, desde la separación y que se enteró de el gran historial de amantes de su esposa quedó destrozado, fue un gran escándalo mediático, pero a la vez era un secreto a voces.

Bueno, era mi turno, sentía desfallecer y como mis mejillas se tornaban rojas. Al entrar al gran escenario fui recibida por aplausos del público, eso me tranquilizó mucho. Me saludó Simon, y preguntó mi nombre, edad y de dónde era.

-Me llamo Eleano Rigby-dije mientras mis manos temblan- tengo 23 y soy de Melbourne, pero vivo aquí en Liverpool

Simon me dio la entrada y todos aplaudieron.

Comencé a cantar y a tocar ''Blackbird'' de los Beatles, el público quedó asombrado y vi a más de alguna mujer llorar. Cuando terminé los jueces me miraron anonadados, excepto Simon.
Al final David presionó el Golden Buzzer y me puse a llorar de alegría, jamás pensé que podría siquiera pasar la primera ronda.

Me dijeron que cantaba muy hermoso y que era casi poético que cantase una canción de los Beatles llamandome como otra canción de ellos.

El único que no hizo ningún comentario fue Simon.

Salí feliz y los concursantes siguientes me felicitaron, las cámaras me apuntaron y preguntaban una que otra cosa.

Me fui a casa, un pequeño departamento en el piso 8 de un edificio ,que tengo pintado de color crema, sillones ocre y en la terraza muchos cactus y plantas. Soy una persona de gustos sobrios.
Revisé mi celular y tenía muchos mensajes de felicitaciones de parte de mis colegas.
Estaba muy feliz, dejé mi ukulele tenor colgado y me hice la cena.
Prendí el televisor para ver las noticias un rato, y salí yo como la primera ganadora del Golden Buzzer de la temporada y que ya casi acaba el periodo de clasificación.

Bueno, me bañé, puse pijama y fui a dormir.

Me levanto sintiendo el despertador, miro por la ventana y veo que está nublado, la verdad es que los días así me hacen muy feliz. Me levanto y voy camino al baño, donde me ducho rápido y visto, elijo un vestido floreado con mangas y medias negras y unas zapatillas negras con zuela blanca.

Mientras ordeno mi casa me como el desayuno y recuerdo que hoy es sábado, nada puede ser mejor, sábado y haber pasado directamente a la semifinal.

Tengo unas ganas de comer algo dulce y voy a comprar unos macarons al café del centro.

Me puse un abrigo color crema y salgo, cuando llego a la tienda muchas personas me reconocieron y pidieron foto, no estaba acostumbrada a cosas así, pero accedí amable. Ya después de que compré los macarons salí a pedir un taxi ya que se había puesto a llover y no iba con paraguas.

De repente un auto para frente a mi y baja el vidrio, pero era sólo un tipo cualquiera preguntando una dirección la cual di. No apareció ningún taxi, así que sólo me puse a caminar, iba toda mojada. De repente pasé por frente al teatro y recordé lo que viví anoche. Sonrío involuntariamente y siguo mi camino, los macarons van seguros en mi mochila de cuerina.

Aún faltaba harto para mi casa y ningun autobus estaba cerca, ni taxi y el metro no me dejaba para nada cerca de mi casa.
Bueno, iba caminando cuando siento que un auto se detiene a mi lado, debo decir que me espanté bastante, empecé a apurar el paso y el auto me siguió un par de metros hasta que se abrió la ventana y sentí una voz gruesa que me decía ''está lloviendo muy fuerte, no crees?'' Mi cerebro reconoció la voz y miré instintivamente dentro del vehículo, no era nada más ni menos que el mismísimo Simon Cowell, se veía serio y ojeroso.

Lo saludé y seguí mi camino, la verdad me parecía atractivo y muy serio y duro al momento de juzgar, pero eso mismo me hacía sentir miedo de estar cerca de él, no agradarle y que me tratase mal.

Oye- me dijo- te llevo a casa? Está lloviendo fuerte y nadie quiere que la chica Golden Buzzer de esta temporada se enferme.

Accedí, y me subí a la 4x4 negra. Estaba tibio dentro y yo iba toda mojada, me disculpe por dejar el asiento así, ya que se veía caro y lo que menos quería era fastidiar a Simon.

Me gusta hablar y soy buena par ello, pero Simon parece de pocas palabras así que guardé silencio.

Dime donde vives, por favor-dijo sin mirarme.

Vivo, cerca de la estación de gasolina, cuando estemos allí le aviso donde girar- dije en un hilo de voz, estaba muy nerviosa.

Simon no dijo nada tampoco, ya llevábamos 10 minuto de un viaje con un silencio sepulcral y tenso. Llegamos a la estación y le indiqué girar a la derecha, luego al final de la calle a la izquierda y listo, llegamos al edificio.

Cuando llegamos le agradecí por las molestias y le ofrecí pasar a mi departamento por un café, como manera de agradecimiento, el me miró serio dio un suspiro y aceptó.

Llegamos a mi departamento y le ofrecí asiento, le pedí unos minutos para cambiar mi ropa . No dijo nada.

Llegue al comedor con unos pantalones de buzo negros y una sudadera rosa palo y pantuflas, le pedí disculpas por andar así pero cuando el me vio hizo una pequeña mueca de sonrisa.

Le preparé un cafe en máquina, para mi un té y puse los macarons sobre la mesa, se sentó y comenzó un dialogo muy ameno.

Preguntó sobre mis padres y le comenté que vivían en Noruega, pero que eran oriundos de Derby, también le gustó mi estilo de vida, muy Sobrio.

Hasta nos reímos un poco comentando sobre los concursantes y todo.

Simon después tuvo que retirarse por motivos que no especificó y ho tampoco pregunté. Lo despedí fuera del departamento y me dio un beso en la mejilla, vi el auto partir y como la lluvia se detenía un poco, y como apenas se escondía el sol.
Subí al departamento y cociné unos espaguetis y una taza de té, miré por la ventana y recién ahí tomé el peso a que estuve toda la tarde con el famoso juez de 47 años Simon Cowell, y que hablamos como dos viejos amigos.

Ya me dieron las 9, puse ropa a lavar, lavé la loza y ordené mi pieza. Ya me fui a dormir y estaba muy feliz, esto no puede ser verdad

Hola, este es mi primera historia, es que me gusta mucho Simon pero no encontré ninguna historia, así que yo hice una. Quiero aclarar que le bajé la edad a Simon porque si bien ahor tiene 59 nuestra protagonista sólo 18 y podría ser su abuelo, entonces le bajé a 47, porque me parece más ''correcto''.

CASUALIDAD.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora