P E S A D I L L A

One Shot

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31 ͠ᴅ͠ᴇ ͠͠ᴏ͠ᴄ͠ᴛ͠ᴜ͠ʙ͠ʀ͠ᴇ

͠ᴅ͠ᴇ͠ᴛ͠ʀ͠ᴏ͠ɪ͠ᴛ, 9:50 ͠ᴅ͠ᴇ͠ ͠ʟ͠ᴀ ͠ɴ͠ᴏ͠ᴄ͠ʜ͠ᴇ

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La televisora había indicado fuertes lluvias que azotarían a la ciudad por la noche.
Las calles permanecían solitarias por culpa de la llovizna y los locales independientes habían cerrado.

⎯ ¡Joder! Conservaba la esperanza de que este local estuviera abierto ⎯ Hank gritó al aire mientras pateaba una piedra invisible, cosa que casi le hace perder el equilibrio.

⎯ Teniente, ¿quiere que sigamos buscando? Puedo verificar que local está abierto en este momento⎯ Connor sostuvo con un poco de fuerza el brazo del mayor para que no cayera, y levantó su mirada como asegurándose de que estuviera bien.

⎯ Y si podías hacer eso, ¿por qué no lo hiciste antes? Maldición, Connor. Pudimos evitarnos todo esto.

⎯¿Se refiere a caminar? No, usted necesita caminar al menos treinta minutos al día. Debería saberlo, lo indica su dieta.

El androide sostenía con su brazo desocupado una sombrilla oscura que compartía con Hank, y veía a los alrededores esperando ver algún puesto de comida rápida o lo que fuera para calmar al hambriento teniente.
Hank se soltó del agarre y miró a Connor con molestia.
Estaba claro que la idea de salir a pasear y con la llovizna que apenas empezaba a caer suavemente sobre la acera fue una pésima idea.
Pero no tuvo opción, usar el hambre como excusa para sacar a caminar a Hank, valió la pena, pues había caminado más de lo que acostumbraba en una misión de persecución.

La lluvia empezó a caer más rápido y con más potencia que antes, esto provocó un gruñido por parte del mayor, que se cubría el rostro con el cuello de la chaqueta.
Connor decidió inclinar más la sombrilla y así evitar que las gotas cayeran en frente.

⎯ Teniente. ⎯ la voz del androide era suave, y mantenía un tono tranquilo. Su cuerpo no sentía frío, así que no comprendía la sensación de querer buscar refugio por la lluvia ⎯ ¿Quiere que paremos ahí? Parece estar seco ⎯ indicó un local techado, por supuesto que estaba cerrado, pero estaba seco.

Hank no respondió pero caminó rápido hacia el lugar que Connor le había indicado.
Soltó una bocanada de aire. Y luego se recargó sobre la pared, viendo como la lluvia se intensificaba.
El menor estaba a un lado, doblando el paraguas y salpicando los restos de agua.
Se había humedecido los hombros y parte de la ropa.

⎯Connor... ¿por qué haces todo esto? ⎯ Hank miró al chico y se cruzó de brazos, esperando su respuesta.

⎯ Porque deseo hacerlo, teniente ⎯ Connor posó su mirada penetrante sobre él. Contestaba sin vergüenza, y sin rodeos ⎯ necesito saber que está a salvo. ¿Quiere que le recuerde por qué?

⎯No, no es necesario ⎯interrumpió Hank tan rápido como pudo. Recordó que el androide había descubierto su intento fallido patéticamente de suicidio, y no quiso preguntar más.