En francia, en el año 1920 Margareth Ainsworth y Steve Rogers eran dos niños de alta sociedad que al verse por primera vez se enamoraron el uno del otro, después de un trágico accidente Margareth se tiene que ir de París e irse a vivir a New Orleans...
Después de que Margareth se fuera de París, ella estudio en una escuela de modales, y Steve se unió a la milicia por sugerencia de su padre, pasaron los días y las noches y así pasaron los años, Margareth se volvió una chica fina y con muy buenos modales y una gran artista reconocida, Steve se convirtió en el Coronel de la milicia, ambos ya eran mayores de edad, pero ninguno se olvidaba del otro, aunque lo que no sabían era que el destino los reuniría en el momento mas inesperado para ambos.
Era una noche, donde se celebraban las personas mas reconocidas del mundo, donde ambos estarían sin que supieran que el otro estaría ahí, llega una limosina, que traía a Margareth con un vestido corto por las rodillas blanco y unos tacones blancos brillantes.
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Mientras que Steve ya estaba en la fiesta, vestía un esmoquin blanco.
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La fiesta empezó y todos estaban bailando, luego ponen una música lenta y cada persona busca una pareja, Steve estaba buscando a una chica y ahí la ve, a Margareth buscando pareja, el se le acerca y pide bailar con ella, y ella acepta aun sin reconocerlo.
-Estas bellísima, como cuando te fuiste.
-Gracias, pero, te conozco?
-Claro Margareth no me recuerdas?
-Disculpa pero no.
-Eso supuse, soy Steve Rogers, el hijo de Carlos Rogers y Monica Rogers.
