CASI PERFECTO

2.1K 245 28
                                    

"Minho sería el hombre perfecto, si no tuviera ese defecto"

Nunca olvidaría aquella cena que hizo la empresa donde trabajaba, aquel rincón donde me encontré con el hombre de mis sueños.

Cabello negro con algunas canas a los costados, rostro maduro, ojos negros y profundos, en una piel de canela...

El producto de mis sueños estaba tomando un vaso con agua en una cena llena de alcohol, fue lo que me llamo la atención. Cuando decidí acercarme y hablarle termino de enamorarme, era un completo caballero, educado, amable y agradable. Nunca me arrepentiré de haberle hablado esa noche, de batear mis pestañas para llamar su atención, de tocar disimuladamente sus grandes manos; Pero si me arrepiento de preguntar sobre ese tema y encontrar su defecto.

. Seguía siendo el hombre perfecto

Aunque solo tenía un defecto.

Nuestra relación fue mejorando con el pasar de los días y no paraba de impresionarme.

No tomaba, odiaba el cigarro, le gustaban los niños, salir de paseo, quería explorar el mundo.

Era justo lo que yo Lee Taemin busque por tanto tiempo... Choi Minho era quien quería en mi vida.

Así que decidí perdonar ese defecto.

Porque lo amaba, lo amaba con locura y cada parte de mi ser ¿Quién no amaría a alguien que lo trate como lo más preciado que tiene? ¿Quien no amaría al que le hace el amor todas las noches? Simplemente estaba enamorado y lo quería para mí a pesar de ser su secreto.

Para una parte del mundo éramos una pareja, él me presumía frente a sus conocidos y me ocultaba de sus amigos.

A pesar de eso seguía queriéndolo y aguantando sus defectos.

Cómo cuando llegaba a mi apartamento a las dos de la mañana solo para que tuviéramos unos momentos en mi cama o en cualquier lugar en donde me estampará y decidiera hacerme suyo, por unos momentos que me sentía el único en su vida lo más importante que existiera para él, cada que sus manos recorrían mi cuerpo, sus labios se juntaran con los míos y nuestros ojos se conectaban cuando éramos solo nosotros, cuando éramos solo uno.

Luego de cada encuentro me besaba con dulzura y cariño, me susurraba al oído cuanto me amaba y que algún día llevaría su apellido en mi nombre.

Lo único que quería era amanecer con él, que me diera los buenos días, preparar juntos un desayuno y despedirlo cuando fuera al trabajo pero solamente teníamos unos minutos antes que el sol saliera y volviera a recordar ese defecto.

Pasamos tres años de esa manera hasta que llegue a cansarme.

—Minho, tenemos que hablar.— declaré firme.

Él se giró a verme mientras se quitaba su corbata, cómo me molestaban sus trajes, siempre los usaba, prefería verlo con un jeans corriente y una camiseta o a veces lo prefería sin nada de ropa...

—¿Qué sucede mi amor?— me habló con notable preocupación tanto en su voz como su mirada.

Respiré hondo una, dos, tres veces ya no recuerdo tantas antes de abrir los ojos y mirarlo... Ahí tenía al marido perfecto, al padre perfecto y muchos me dirían idiota al saber cómo nos amamos, cómo nos queremos y deseamos, otros porque Minho es el mejor prospecto, claro que un millonario es buen partido para cualquiera y a mí no me importaba eso, me valía el dinero, me importó poco sus defectos y lo ame, me volví dependiente de él pero ya no.

Me cansé de su maldito defecto.

—Quiero que esto termine.— solté sin arrepentimientos mirándolo a los ojos.

Casi PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora