Histéricos del otro lado

Especial Navidad

Llegamos a New york porque Lali estaba preparando un ambicioso desfile de moda navideño dedicado a las chicas que amaban esta época del año, para el mundo era un poco extraño todo porque ella no era demasiado fanática de las fiestas pero lo que no sabía la gente es que desde que las niñas estaban con nosotros todo había cambiado al 100%. Su celular que estaba sobre la mesa no dejaba de sonar con el timbre de los correos, estabamos juntos hace un montón y me seguía sorprendiendo la capacidad que tenía para estar al mando de todo.

–Mamá! Crees que esta chaqueta me combina? –preguntaba Allegra bajando las escaleras, una mini Lali boss completamente preocupada por la moda – Me gustaría llevar las botas rojas que me regalaste ¿Puedo usarlas?

–Claro que si mi amor – respondió ella mientras estaba abrigando a Isabellita que miraba con atención absolutamente todo – Allegra baja tus guantes porque hace demasiado frío. ¿Te parece buena idea salir a caminar con las chicas con esta temperatura? Yo creo que no están tan acostumbradas a este frío demasiado crudo – me puse de pie y le di un beso –

–Mi amor, por favor. Prometiste que te ibas a relajar en este viaje, tenemos que ir patinar como le prometimos a las chicas, hacer monitos de nieve y sacarnos un montón de fotos para que cuando sean grandes digan ¡WOW MIS PADRES ERAN LOS MAS DIVERTIDOS DEL MUNDO! – ella soltó una risa y me abrazó –

–Ok, pero solo quiero pedirte algo. El color rojo no combina con esos pantalones de camuflaje y si los sigo mirando una vez más quizás me voy a desmayar – solté una carcajada  – Prueba con algo de otro color por favor.

–Sabía que ibas a decir algo de mis pantalones – dije parandome para ir por otros, esto era lo peor de estar con una mujer tan experta en moda, no me dejaba pasar una sola, me cambié y le ayudé a Allegra para que terminara de abrigarse pronto porque se estaba tardando demasiado  – ¿Hace falta que tardes tanto? Eres demasiado chiquita para tener tantos problemas con la moda

–Tu no lo entiendes – me respondió mientras movía sus chaquetas – En algún momento te darás cuenta de lo importante que es estar linda cuando sales a la calle con mamá, a ella todo el mundo la mira ¿No te diste cuenta? Está en todas las revistas de moda dando su opinión, que suerte que te dijo lo de los pantalones papi, lo siento pero tampoco me gustaban

–Dios, no puedo creer que tengo que lidiar con dos controladoras – la cargué inmediatamente – No me gusta que te comportes como una niña tan grande porque solamente tienes 10 años, ahora toma una chaqueta y nos vamos o te vas a quedar acá aburrida toda la tarde porque no pienso esperarte mas. – me miró sorprendida y tomó una nueva chaqueta, luego bajó corriendo para informar nuestra conversación mientras Lali me miraba con una sonrisa –

–Papi, para mi siempre estas lindo – dijo isabella dandome un abrazo, mi chiquita –

–Bueno listo, estamos todos lindos ya podemos salir a la calle – agregó Lali mirando el celular, bajamos al auto para irnos a patinar los 4 –

Yo me hice cargo de la mas chiquita porque ella no sabía y por supuesto que no quería que se lastimara, Allegra corría como loca por todos lados y Lali estaba en un borde con el puto/desagradable celular hablando algo molesta.

–Alle, te puedes quedar con tu hermanita un segundo? – dije dandole la mano, ella vino rápido y la tomó del brazo – no se muevan de acá ¿Dale? – Patiné a Lali que estaba bastante cerca – ¿Me estas jodiendo? Me prometiste que nos dabas este día exclusivamente a nosotros y no dejas de trabajar.

–Peter, en menos de una semana tengo el desfile mas importante del año mi amor, lo siento estoy haciendo lo que puedo pero también tengo montón de cosas por resolver que no están funcionando en la oficina si no estoy, ya sabes como es todo el mundo, tu también me prometiste que me apoyarías en todo esto. – me quedé de brazos cruzados – Dale, no me hagas esa carita, lo voy a guardar – creo que era la única persona en el mundo con la que Lali podía aflojar un poco, me dió un abrazo y luego un beso, nos fuimos con las chicas para continuar con lo nuestro pero obviamente su celular jamás dejó de sonar–