Prólogo

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- No sé cómo sucedió, yo estaba en mi cuarto, escuche los gritos de mi hermano y salí a ver qué pasaba - ella no deja de ver a la nada, esta pálida, temblando, y bañada en sangre, pareciera que en cualquier momento se fuera a desmayar.

-Lo vi en el piso, la ventana de la sala estaba rota, mi hermano solo veía a un punto fijo de la pared, mientras se seguía desangrando, corrí hasta él, trate de cerrar sus heridas, pero eran muchas, yo, yo, yo no sabía qué hacer, solo grite hasta que llegaron los vecinos- mira sus manos, cierra los ojos con fuerza y susurra –Pero ya era tarde, mi hermanito estaba muerto.

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