Era un día común y corriente, en aquella habitación azul pastel, se encontraba durmiendo tranquilamente un chico castaño. Se le veía cómodo y tranquilo. Pero como todo lo Bueno se tiene que terminar en algún momento. Sonó su despertador. Luego de estar un par de segundos buscando entre su mesa de noche lo apagó y se sentó en su cama.
-Sera mejor que me valla levantando, no quiero que el viejo del director me arruine mi día, sería un gran estorbo -se estira y luego busca sus lentes entre la mesa de noche- Bien, es hora de arreglarse -dio un bostezo levantar se para iniciar su dia-
El castaño luego de un tiempo en arreglarse, salió de casa con su mochila en mano con dirección al colegio. Después de unos minutos caminando llegó y entro al colegio, buscando su salón asignado.
Cómo era de esperarse. Era su primer día en su nueva escuela, lo habían transferido por el trabajo de su madre. Estaba algo nervioso por saber cómo sería su nuevo ciclo escolar. Al estar perdido en sus pensamientos una chica había chocado con el, estaba tirada en el suelo maldiciendo se a sí misma por ser tan despistada. A los segundos después se encontró con la mirada del castaño que le ofrecía su ayuda para levantarla con su mano, la chica muy a gusto la tomo y se levantó con sumó cuidado.-Perdona, no era mi intención chocar Contigo -baja la mirada nerviosa-.
-No te preocupes, yo también estaba algo distraído, además por qué eres una enana no te vi. -sonrió de firma burlona mientras miraba a la chica- ¿No te golpeaste muy fuerte?-su mirada mostraba preocupación fingida-
-Tranqui, no fue nada grave. Dime.. acaso ¿Tú no eres de por aquí verdad? -poso sus manos en su cintura, esperando alguna respuesta por el castaño-
-¿Es tan obvio?, Soy un trasferido -dijo con una gran sonrisa en su rostro-
-Con Razón tu cara no se me hacía conocida, ¿qué tal si... Te llevo a tu salón? Y luego vamos a la cafetería en el recreo, ¿Te parece bien? -La chica esperaba con ansias la respuesta del castaño, estaba casi segura de que aceptaría-
-Claro, si no es mucha molestia -le da una sonrisa mientras ocultaba sus manos en los bolsillos del polerón-
-Bien, ¡entonces vamos! -la sonrisa que tenía en su cara desapareció rápidamente al recordar que no sabía en qué salón iba el castaño- ammm... ¿En qué salón ibas?
-A cierto, no te lo dije, ah estoy bien menso, Voy en 8vo A -decía mientras jugaba con uno de sus cabellos-
-Ay pero que cosas... ¡Yo soy de ese mismo cursó!, Parece que seremos compañeros -guía al castaño por el pasillo con dirección al salón, con una sonrisa en su rostro-
Al llegar varios se les quedaron mirando, la chica se dirigió a hablar con la maestra. Mientras que el castaño se quedaba en la puerta Inquieto. Dentro de sí mismo se encontraba en un caos y un nerviosismo incontrolable. Duro así unos minutos hasta que la profesora le hace una señal para que entre
-Bueno Chicos, cómo podrán ver, el es un nuevo chico trasferido. ¿Te gustaría presentarte o avanzar con la clase?
-La segunda opción, además no creo que a los demás estén interesados en que me presenté. -el castaño solo metió sus manos en el polerón del uniforme-
-Esta bien, siente se en la cuarta fila, primer pupitre, al lado de Carlos- el castaño asiente y se dirige hacia su lugar designado-
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✖┆·El Es todo Un desmadre┆✗
Teen Fiction¿Quién pensaría que un chico castaño causaría tantos problemas?, Sep. La pelinegra lo dedujo en aquel momento. Un chico bipolar y extraño llega al pequeño colegio "Santa Clara" que para su mala suerte es religioso. Que pena~, que dolor~. Ella no pen...