Heat.

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Era de noche cuando Bakugou y Kirishima regresaban al campamento, lucían cansados y sucios de seguro se habían desviado y enfrentado con algún grupo de bandidos de regreso con las provisiones, ahora no había necesidad de pelear, no por el momento, por lo que mantener a esos dos en raya era un poco difícil. Se notaba la ligera tensión en cada uno de los presentes, no habían descansado del todo pues aún habían personas que los perseguían, pero no por alguna mala acción, si no por el último heat de Kirishima.

De un momento a otro se había salido de control, ese día Bakugou se encontraba con Todoroki en el campamento mientras que Deku y Kirishima fueron los encargados de ir a recoger las compras que Uraraka e Iida habían pedido dias atrás. Todo iba bien, sin embargo, Deku no notó aquel sonrojo que aumentaba en el rostro del contrario con cada paso que daba. Sabía que la unión entre amo y sirviente era muy fuerte, que ese vínculo mayor al amor o tal vez similar solo se rompía con la muerte de su señor, y que ante los ojos de Kirishima solo una espalda se reflejaba. Y sobre todo que aquella sonrisa perversa era la causante de las sonrisas más brillantes del chico.

Todo eso se le olvidó cuando lo vió caer al suelo. Había sido rápido, en medio del pueblo Kirishima yacía en el suelo con una respiración dificultosa.

De inmediato Deku tocó su frente notando ese intenso calor corporal, a pesar de traer sus guantes puestos pudo sentirlo, la marca en el hombro del chico brillaba y ligero vapor abandonaba su cuerpo.

Aquello iba a ocurrir.

Se giró siendo consciente de la situación y que no era capaz de controlarla, gritó con todas sus fuerzas alertando a los presentes de lo que estaría a punto de ocurrir que, en cuanto un gran rugido y una nube de vapor inundó el sitio empezaron a salir despavoridos.

Deku cerró los ojos intentando acoplarse al momento pero el calor era intenso, su piel ya se encontraba cubierta de una ligera capa de sudor. Por su parte Kirishima estaba terminando su transformación a Dragón. Aquella figura era tan imponente, ese carmesí brillante que portaba tan orgulloso se lucia con gracia.

Sin embargo parecía cegado. Extendió sus alas decidido a emprender el vuelo, parecía que buscaba algo. Sin embargo a los pocos metros de altura terminó cayendo sobre las estructuras del lugar. 



Hasta ese punto eran conocidos como héroes y el hecho de Kirishima como Dragón ocultado. Debido a esos comportamientos era el porqué del temor de los habitantes del pueblo. Llamó por su nombre al chico que claramente había perdido la consciencia. ¿que podía hacer en esa situación? No traía a su espada mágica con él, sería una acción difícil de controlar.

Por otro lado desde que Bakugou se había separado del chico una angustia se había apoderado de él. Su vínculo era tan fuerte que podía sentir a Kirishima llamándolo. Dió media vuelta y salió hacia la dirección que su corazón le pedía, ni siquiera esperó a que Todoroki lo aceptara, Kirishima lo estaba llamando y nada haría que no acudiera. A pesar de los reclamos el chico bicolor lo había alcanzado en tan poco tiempo.

Deku intentaba dialogar con él, pero aun así Kirishima seguía sin escuchar, tenia que hacer algo y rápido o terminaría destruyendo el pueblo entero.

"Pero solo Kacchan es capaz de aquello".

Eso último retumbó en su cabeza clavándose en el fondo de su consciencia.

Pero no podía darse por vencido. Él contendría a Kirishima hasta que Bakugou llegara. Se lanzó sobre el intentando montarse en su lomo, pero solo causó más confusión.

Movió la cola derribando la iglesia más cercana detuviendo los escombros con una de las alas, habían algunas personas que se resguardaban en su interior, sus miradas de pánico se clavaron en su piel y al parecer en las de Kirishima también pues se quedó petrificado por un periodo de tiempo el cual aprovechó para subir hasta su cráneo y balancearse hasta el frente del ojo izquierdo agitando los brazos para que fuera notado por el Dragón.

Tenían que irse o sería cazado. Pudo ver como las caballerizas bajaban por la colina donde el castillo estaba.

—Kirishima, Te encuentras mejor?.— fue lo primero que salió de sus labios, sus palabras demostraban miedo ocultado detrás de ese valor.—Tenemos que irnos.—

No obtuvo una respuesta, se quedó observando el iris dorado del dragón, era algo sorprendente pues cuando estaba en esa forma el color cambiaba, perdía ese rojo intenso por ese dorado brillante. Deku sacudió la cabeza pues no era momento para pensar en detalles, era uno de sus malos habitos que al momento no había podido eliminar.

El vapor se soltó nuevamente golpeándolo directamente, la piel dura de Kirishima empezaba a calentarse nuevamente, no pudo mantenerse más cerca que terminó cayendo al suelo, por suerte la altura no era tanta.

Pudo notar una silueta entre esa pantalla de gas acercarse más y más, se puso en guardia relajándose al distinguir al chico, sonrió al verlo pero de inmediato volvió al suelo. Se había desmayado nuevamente. Se arrodilló levantándolo para cargarlo y aunque no sirviera de nada se quitó con rapidez la camisa delgada y ese chaleco verde que siempre usaba para cubrir a su amigo desnudo. Por suerte el vapor hacía su tarea más fácil, su corazón latía demasiado rápido y su respiración subía más y más. Sabía que Kirishima estaba llamando a Bakugou, sabía que cada palpitar era para él, pero aún así habia sido él quien habia vuelto a Kirishima a la normalidad.

Lo cargó aprovechándose del humo aún presente para fugarse del sitio. Iba tan pendiente de su huida que no notó al chico enfrente de él, parecía que los esperaban. Chocó contra el pecho semidesnudo del rubio cenizo, notó como aquella mirada lo apuñalaba con cada segundo.

—Ka-Kacchan yo...

—Aléjate.

No tuvo oportunidad de nada más, Bakugou había recuperado el cuerpo de Kirishima que aún yacía inconsciente aventándole las ropas en el rostro, se quitó la capa roja que llevaba y lo cubrió.

No dijo más.

Se adentró en la espesura del bosque, era normal pues como amo de Kirishima debía encargarse de su heat.  Suspiró mirando a Todoroki que por todo ese revuelto apenas notaba en el lugar.

—¿Estas bien, Midoriya?

No respondió, ni siquiera él sabía si lo estaba. Todo ese pequeño lapso pensando que había sido él quien había controlado a Kirishima, que por fin había encontrado una manera... pero no fue así, encontrarse con los chicos se lo comprobó.

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⏰ Última actualización: Jul 20, 2019 ⏰

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