My new son

6 3 0
                                    

Recuerdo ese día...

Mi mejor amiga tenía una semana de haber dado a luz a un lindo niño a quien por nombre le pondría Víctor..

Él fue producto de una noche de copas con un japonés para tratar de ahogar sus penas por un hombre que no la valoró hace tantos años.

Ese día lo recuerdo con tanto dolor que inclusive podría tirarme por la ventana a mi lado y no sentir nada peor.
Podría romperme la columna y aún no sentir el dolor que sentí en mi pecho aquella ocasión cuando a mi casa en Daeng llegaron dos oficiales de relaciones internacionales con un traductor y un pequeño bebé de tan solo 6 meses de edad...

Un bebé que yo bien conocía porque...
Lo tuve en mis brazos el día en que nació y juré siempre cuidarlo si algo le pasaba a su madre...

Los oficiales me dijeron que había pasado, ella había llevado al niño a la guardería y después se habría dado un tiro en la cabeza enfrente de la misma...

Me odio tanto por no haberla ayudado cuando pude, de no haber estado con ella en todo momento, de no haber evitado que se intentará suicidar más de 5 veces en menos de 1 mes hasta que por fin lo logró.

Me dejo su casa, pero no quiero ni verla.
Todo me recuerda a ella, en la terraza cuando bebíamos café platicando de como es de diferente un país y otro, de la gente, de la universidad, de nuestro ligues, de nuestros trabajos y de la vida en general para que se nos hiciera de noche y admiráramos las bellas estrellas con las que siempre soñamos ver desde otro ángulo de la tierra...

En su pequeño cuarto con pósters de animes como la mujer más infantil que he conocido con ese espejo de cuerpo completo que siempre hacía sentirla menos donde nos tomábamos fotos juntas que después pegaríamos en él...

Recuerdo verla admirandose y al mismo tiempo odiándose por no ser lo suficiente para alguien, pero ella lo era para mi.
Era hermosa, siempre me gustaba que cuando se desnudaba y se ponía enfrente de ese horrible espejo yo pudiera abrazarla y con caricias y dulces besos la pudiera terminar haciendo mía toda la noche para que al final solo fuera una aventura más y un secreto entre ambas...

Esa cocina donde todas las fiestas navideñas y patrias cocinábamos y hacíamos el peor de los desastres para que la comida y la cena quedarán increíbles y deliciosos y al recogerlos siempre nos robáramos un beso y otro más y otro, mientras ella lavaba los trastes y yo los secaba y acomodaba...

Esa sala de estar donde siempre que yo iba terminábamos viendo mis películas favoritas asustandola en las noches o madrugadas disfrutando del tiempo juntas con un buen chocolate caliente y una manta abrazadas siendo una de nuevo...

Esa puerta por la que entré tantas veces, donde me recibió con un fuerte abrazo a pesar de haber llegado por sorpresa, donde comenzaban las nuevas experiencias y las nuevas aventuras juntas...

Ese baño donde nos mojamos como niñas pequeñas jugando en una alberca dejando agua a su paso bailando y haciéndonos peinados raros la una a la otra con la espuma riendo por nuestras tonterías...

Ese comedor que a pesar de solo tener mis tapetes hechos a mano obsequiados para que su casa tuviera un toque mío, no era solo, era perfecto para ambas donde a veces nos sentábamos en la mesa a charlar como si fuéramos unas personas muy importantes diciendo cosas muy fuera de esa elegancia...

Esa ventana donde siempre que me sentía terrible lloraba en su hombro o ella lo hacía en el mío, donde cuando una veía el caos de la ciudad y su mente estaba en otro lugar tan lejano la otra llegará y la abrazará por la espalda haciéndola volver, sonriéndole y mirándola para que sus problemas y sus penas no vuelvan...

Esa casa...
Donde pasamos cosas increíbles y malas, reímos por nuestras tonterías y lloramos por nuestros fracasos, nos divertimos haciendo cosas de niños y nos consolamos haciendo el amor cada noche para sentirnos mejor en la mañana que nos viéramos o nos sintiéramos, la casa que juntas compramos donde juramos siempre amarnos...
Dándonos anillos de matrimonio que en realidad para nosotras eran anillos de unión para siempre mirar a la otra en ellos recordándola y amándola...

De pronto las lágrimas salían y salían, no podía detenerlas...
No sabía como hacer que se detuvieran había perdido a mi mejor amiga y no sabía como sentirme, ellos me hicieron firmar un papel que decía que ahora yo era quien cuidaría de esa pequeña criatura que venía con ellos, que ella había dejado en mis manos a su bebé y todas sus pertenencias si algo le sucedía, firmé y ellos se fueron dejándome sola con un bebé que siempre me lo recordaría a ella.

~~~~¥~~~

💫Atte: Yuam

De día, de noche y de vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora