Gravity

536 87 11
                                    

| Capítulo 8 |

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

| Capítulo 8 |



Desde que habían abandonado Dolce Angolo KyungSoo no habló ni una sola vez. BaekHyun dudaba un poco sobre la repentina situación, pero conocía bastante bien al otro chef como para saber que estaba escapando.
Y no es como si le molestara el asunto, pero era inquietante saber la razón por la que inmediatamente huyeron del restaurante.

La radio sigue encendida desde hace un rato sin nada más que las noticias del diario. BaekHyun mira paciente por el retrovisor lateral, mientras intenta buscar las palabras correctas para iniciar la conversación.

—¿Cómo ha estado tu madre? —pregunta primero KyungSoo, sorprendiéndolo un poco por el tono genuino en su voz.

—Bien, ella... digamos que llama dos veces por día y me está volviendo un poco loco.

—Es entendible, la señora Byun está preocupada.

—Ella quisiera estar aquí, pero Seúl está demasiado contaminada para que se quede.

Al final de la charla y con un silencio incómodo, la radio suena con una de esas canciones de moda, llenando el espacio que ambos quieren reducir. BaekHyun sabe lo que debe hacer, por eso utiliza esa valentía pasajera y habla.

—¿Estamos escapando de JongIn? —KyungSoo mira de reojo a su copiloto, pero vuelve pronto toda su atención a la carretera— no me molesta ni nada pero no quiero problemas con él. Algo me inquieta de todo esto.

—¿Qué cosa?

—Respóndeme primero.

KyungSoo suspira como si el aire se agotara y toca impaciente el volante, como nervioso. Luego busca un lugar donde aparcar.

—No tengo problemas con él, pero sé cómo va a actuar ante esto —el auto baja su velocidad. BaekHyun presta atención cuando ve a Kyung señalar entre ambos—, es mi hermano después de todo. Actúa como mi padre.

—Sin embargo dejas que lo haga.

—No puedo detenerlo cuando sé que sus intenciones son buenas. Él duda como cualquiera.

—¿Dudar de qué?

—Responde primero.

Cuando KyungSoo utiliza el mismo método que él, BaekHyun no tiene de otra más que sonreír amargamente.

—Me inquieta sentir que estar contigo es malo.

Las palabras salen sin titubeos, sólo con un tono carente de coraje, ese mismo que BaekHyun llevaba implícito siempre. KyungSoo lo conocía también y sabía que su ex estaba muriendo por saber toda la verdad detrás de ellos. Sin embargo, decir todo era abrir viejas heridas y temblar bajo la almohada hasta que ese maldito monstruo regresara al armario. Por ello, cuando el auto aparca a un lado de la calle, KyungSoo se quita el cinturón de seguridad y baja la ventana, buscando bien lo siguiente que dirá.

ANTARES (Tratado de un adiós) »BaekSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora