Alex the Living ghost

2. Ella...

En esta etapa, tenía 10 años, si no mal recuerdo, iba en 5 de primaria y también era el mejor del salón, me encantaban las matemáticas y siempre trataba de resolver algún ejercicio en el recreo.

Pero a costa de todo eso, era el chico menos atractivo y a la vez era el más don nadie de toda la escuela, nadie se fijaba en mi... Excepto una chica cuyo nombre no sabía hasta el día de hoy.

-Alex, entonces, ¿Cual es tu color favorito?.- Me pregunto la chica que estaba invada enfrente de mi.

La verdad es de que no estaba prestando atención a aquella chica.

-Perdón, no te escuché, ¿Puedes repetir la pregunta por favor?.-

La chica empezó a reírse en voz baja para luego responderme:

-Jajaja, estábamos hablando acerca de lo que nos gusta, ¿Acaso ya te olvidaste? Jajaja, te pregunté ¿Cual es tu color favorito?.-

-Ah, perdón, no estaba escuchando, en verdad perdona, ya llevamos algunos días hablando y todavía no conozco tu nombre, lamento no saberlo, es que no estoy muy acostumbrado a hablar con alguien, normalmente la gente me ignora o intenta alejarse llamándome raro.-

En ese momento la campana tocó avisando a los chicos que debían regresar a clases.

-Vaya, me tengo que ir, al parecer ya acabo el recreo, pero bueno...- Dijo la chica levantándose y posicionando su mano para levantarme.

Correspondí su oferta y me levanté apoyándome de su mano.

-Mi nombre es Evelina.- Dijo la chica mirándome fijamente a los ojos.

-Evelina... ¿Tiene origen ruso?.- Respondí con gran curiosidad y atención.

-Vaya, que listo..., Mi familia es de origen ruso, aunque yo nací aquí en Calgary.- Me respondió. -¿Cómo supiste eso? Jaja.-

-Pues... Me gusta mucho estudiar, aparte de que había leído algo de eso..., ¿Tu familia también es de otro país?, La mía también, solo que ellos son de Estados Unidos.- Le respondí con gesto de sorpresa.

-¡Que genial!, Mira qué coincidencia, ya tenemos algo en común.- Me respondió con risas. - Bueno ya me voy... Y por si acaso... Mi color favorito es el dorado y el negro, ¡bueno nos vemos!.-

-Este... Si, el mío es el rojo y el azul... - Le respondí nervioso. -Emm, ¿Quieres ser mi amiga?...-

-Se supone que ya éramos amigos hace algunos días jajajaja, pero claro, seamos amigos.-

Mientras que ella se iba alejando hacia su clase, me quedé viéndola con gran sorpresa, porque ella fue la primera amiga que hice y la única. Siempre pensaba en eso, en todas las clases solo pensaba en ella y como se siente tener un amigo, pero tenía miedo, ya que no sabía que le gustaba a ella, no sabía casi nada de ella, tenía que preguntarle a alguien con experiencia. Así que terminando la escuela fui a hablar con mi madre acerca del tema, ella se encontraba leyendo un libro de fantasía en su cama, así que me acerque más a ella.

-Mama...- Le dije con voz nerviosa. -Tengo una duda, o bueno... Necesito un consejo...-

-¿Que paso Alex?.- Me pregunto dejando el libro en el mueble al lado de la cama.

-Es que en la escuela tengo una amiga... llamada Evelina.- Le respondí sonrojado. -Y pues como ella es una de mis primeras amigas (la única) quiero llevarme bien con ella, solo que no se como tratar a una chica.-

-Vaya, ya entiendo...- Dijo mi madre abrazándome. -Mi hijito esta enamorado.-

-¿Que?, no no no no.- Le respondí apartándome del abrazo. -Madre, no confunda el querer tratar bien a alguien con querer tener una relación de noviazgo con alguien... Ademas de que no llevo mucho tiempo conociéndola.-

-Tranquilo Alex, solo era una broma.- Dijo mi madre riéndose en voz baja. -Vamos, cuéntame acerca de ella.-

Le empece a contar lo que paso con Evelina, y cada vez la veía mas feliz y contenta simplemente por el hecho de que tenia una amiga en la escuela.

-Ya veo...- Dijo mi madre después de la explicación. -Hijo, en primer lugar debes de prestarle mas atención, dices que nunca le tomaste importancia los días que se llevaban conociendo, ¿no?.-

-Si...- Le respondí.

-Pues tienes que prestarle mas atención hijo, ella no necesariamente tiene que empezar la conversación, si en verdad te interesa hablar con ella, hazle el favor de empezar algunas veces tu la conversación.- Me Dijo con gran confianza.

-Lo intentare madre, sabes que me cuesta hacer eso...- Le dije.

-Se que eres tímido Alex, pero debes de ser consciente de que aveces tenemos que dejar afuera esa timidez y miedo, sino... ¿cuando vas a empezar a vivir?.- Me dijo con esos ojos tan bellos que tiene y con mucha fe en mi.

Al siguiente día iba confiado pensando en las palabras de mi bella madre, pensando que tal vez podría corregir mi baja autoestima con Evelina.

Sin embargo, cuando fui caminando hacia la escuela, me di cuenta de un coche gris que iba atrás mio, pensé que era como cualquiera y continué caminando, pero cuando el coche logro alcanzarme se detuvo repentinamente, las puertas se abrieron y de estas salieron 3 tipos con traje oscuro y lentes, se acercaron hacia mi y me dijeron que fuera con ellos, pero obviamente como no los conocía les dije que no y seguí caminando, sin embargo me agarraron de todas las extremidades, empece a gritar como loco pero no dure mucho ya que me habían tapado la boca, para terminar metiéndome en el coche y empezar a manejar lejos del lugar.