Obsecion || YOONMIN

Capitulo 3

Había pasado dos semanas y ya tenía todo planeado. Las escenas que debía de decir e incluso lo que iba a hacer para encontrarse con Jimin, el plan más perfecta jamás hecho.

—Ahora si, esperemos que te enamores de mi, porque yo ya lo estoy—decia mientras colocaba las cajas de mudanza adentro de su nuevo departamento—

Había llegado la hora, estaba emocionado pero a la vez feliz, sentia su sangre ponerse caliente cada vez más y eso era bueno, muy bueno y muy excitante. Estaba afuera de aquel edificio esperando a que Jimin entrara al edificio y ahí lo vio.

Jimin bajaba de un taxi y vio como le mandaba un beso volado  al taxista, le enojaba cuando le coqueteaba a los taxistas para que no le cobrara nada, ni un puto centavo, le enojaba eso. Jimin solo era de él y solo de el y eso le iba a dejar en claro.

Sonrió cuando tenía unas bolsas en mano, y por último aquel taxista le dió un papel que supo que era su número, Jimin sonrió y se dió la vuelta rodando los ojos por la acción de aquel taxista. Ahí se sentía bien, demaciado bien.

Arreglo su atuendo, unos pantalones negros rasgados y una polera de manga larga negra igual, con una bolso negro varonil; ese día sería uno perfecto.

Entro al edificio con una sonrisa, detrás de Jimin y un poco nervioso tocó su hombro haciendo saltar de susto. Volteo y pudo verlo a los ojos.

—Oh, perdón —se disculpo Yoongi—no te quería asustar pero soy nuevo aqui y soy tu vecino de al lado, ¿Sabes dónde puedo depositar el dinero?

Hablo nervioso, porque carajos estaba nervioso, jodida mierda.

—Espera... ¡Tú eres el señor de la basura de la secundaria! —lo señalo—

Sentía sus mejillas arder, se sentía incómodo y ese no era parte del plan.

—Tan obvio es—murmuro—

—Lo siento si te incomode, solo que me sorprendió; solo eso. Y claro, vas a la primera planta le preguntas a la señorita por el dueño, se llama Namjoon, y a él le tienes que pagar, solo eso.

—Ahh, muchas gracias...—

—Jimin... Un gusto —extendio su mano—

—Muchas gracias Jimin, yo soy Min Yoongi —agarro la mano de Jimin—

—Lo se, todos lo saben, adiós.

Y se fue de ahí dejando a un Yoongi desconcertado por un problema, no había dicho lo que tenía que decirle ¡Díablos!

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¿Capitulo 3? Si, bueno, espero que te allá gustado y no olvides darle una estrellita a este capítulo y a los demás ¡adios!