te emparejarás con un alfa

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YoonOh se ha puesto una camisa negra y un pantalón en el mismo tono, ha luchado para que la raya del pantalón quedara prolija. Encima, se puso el traje del conjunto (regalo de uno de sus padres) y se colocó el abrigo beige que le había regalado YoungHo. Ajustó el nudo de su camisa y sintió que estaba listo en apariencia. Su heramana mayor, SooJung, se acercó a él. 

La hermosa alfa, lo miró con una sonrisa. Rara vez la veía sonreír porque no era su estilo hacerlo. Pero cuando lo hacía, volvía a lucir como si fuera la niña que lo defendía cuando algún otro niño se pasaba de la raya con sus burlas. 

Ella pasó los dedos por la solapa de su abrigo y estiró la mano hasta alcanzar el peine y repasó el cabello engominado de su hermano menor. 

"Vas a estar bien, Jung YoonOh" no sonaba como una frase esperanzadora. Era una realidad. Ella lo estaba asegurado y si lo aseguraba, entonces pasaría. Ni siquiera el destino tenía el coraje de contradecir lo que Jung SooJung afirmaba. "Ahora ve". 

Su familia lo acompañó en un silencio cómplice. No había un clima de tensión, todos estaban contentos a su manera. Aunque claro, su familia no era la más parrandera de todas porque todos poseían personalidades tranquilas y taciturnas. En ese momento, le hubiera gustado que sus padres fueran más expresivos con él. 

Se bajó en el Instituto de Relaciones. Su comunicador titilaba mostrando lo único importante en ese momento: el número de la sala en la que se encontraría con su pareja. Antes de terminar de subir la escalinata, miró a su familia. Las tres personas estaban allí amontonados, luciendo increíbles con sus abrigos largos bajo ese pesado frío de Enero. 

Por más que estuviera enamorado de YoungHo, sabía que nunca podría tener ese retrato familiar con él y YoonOh de verdad quería eso. Quería una familia más grande y más cálida que la que él tuvo. No los reprochaba, los amaba también. Entendía que todos fueran así y estaba bien que los hubieran criado como sentían que debían hacerlo. Pero quería más. 

Ingresó y se dijo a sí mismo que no pensaría ni en ellos, ni en John Seo. En ese momento solo tenía que concentrarse en su futuro. 

Cuando ingresó a la sala, tomó asiento en una de esas butacas minimalistas enfrentadas que estaban frente al aparatejo con la pantalla. Bajo la pantalla, habían dos reposabrazos. Supuso que era para cuando les colocaran el lazo. Se sentó de espaldas a la puerta. 

Tomó una respiración profunda. Pronto entraría un pequeño omega, segurísimo. Un chico diminuto, con un carácter amable y dócil (si es que no era como MinSeok-hyung), que sería bueno con él. Será ideal para mí

Se tensó visiblemente cuando escuchó la puerta y pronto, el sonido de pasos avanzando hacia donde él estaba. 

Sus ojos se abrieron enormemente y hasta dejó escapar un sonido de exclamación. Levantó la cabeza tan rápido que pensó que se caería de la butaca. 

Frente a él había un muchacho que seguro tenía su misma altura. Aunque había conocido omegas altos, no necesitaba ser un adivino para darse cuenta que la persona frente a él era un alfa. Había algo en su mirada que lo gritaba. 

El chico se sentó frente a él, como la distancia entre los taburetes no estaba diseñada para que los dos fueran altos, sus rodillas se rozaban. Estaba tan impresionado que no era capaz de sentir su olor. Sus ojos se paseaban indecisos por todos lados menos cerca de su rostro. 

"Por favor, digan sus nombres" pidió la voz que sonaba casi natural. 

"Kim DongYoung" dijo él, con total seguridad. 

Él titubeó. 

"Jung YoonOh"

"Felicitaciones, los cálculos obtenidos por S.I.M.O.N nos indica que ustedes están hechos el uno para el otro. Esperamos que su unión traiga prosperidad a la nación y a ustedes mismos. Vivan una vida larga y feliz juntos, con la bendición de la nación y la seguridad de que el sistema los respalda. ¡Enhorabuena!"

En la pantalla, hubo una explosión de pétalos de rosas que se le hubiera antojado graciosa en otra ocasión. 

"Por favor, coloquen sus brazos en el posa-brazos con las manos extendidas para que se pueda formar el lazo"

"Dicen que si entrelazas las manos, es más fácil" susurró el chico, inclinándose ligeramente hacia delante mientras colocaba el brazo en su sitio. 

YoonOh observó el rostro del muchacho, luego su mano y luego la pantalla en la que seguían lloviendo pétalos rosados. Apoyó el brazo y entrelazó sus dedos con los del desconocido. Entonces, sintió un pinchazo. 

"¡Ya están listos para comenzar su nueva vida!"

Les mostró su nueva dirección y sintió una vibración en su comunicador, había cambiado la localización de su hogar así que no era necesario que lo memorizara. Le entregaron una llave a cada uno, que era una tarjeta magnética. 

Ambos se pararon, DongYoung se encaminó primero hacia la salida. YoonOh frotaba su dedo anular. Sabía que tardaba hasta tres días que el lazo se formara del todo, mientras que la marca se iba extendiendo hasta completar el círculo alrededor de su dedo. Por ahora, era solo un punto marrón oscuro. 

Atajó a DongYoung por el brazo. 

"¡Eres un alfa!" exclamó en voz baja. 

"Wow, Sherlock" 

YoonOh apretó la mandíbula. 

DongYoung se soltó de su agarre. 

"Ya sabes que las relaciones usuales son alfa-omega y beta-beta, pero a veces no pasa así. Es algo así como un bug. Pero no es como si fuera distinto a las relaciones usuales, después de todo, fuimos elegidos por el mismo algoritmo que elige a todas las parejas en todo el mundo. Así que no pongas esa cara, no necesito sentir tus emociones para darme que en realidad seguro querías un omega chiquito y bonito" comenzó a caminar. 

Después se detuvo, se giró sobre sus talones para mirarlo. 

"Aunque no soy lo que esperes, podríamos llevarnos bien... Después de todo, tenemos toda una vida por delante". 

simon saysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora