hija de la luna

•°.Parte 4 si amas algo, déjalo ir .°•

después de salir de la casa, luna se dirigió a la casa de sol y al llegar comenzó a secar sus lagrimas para no alarmar a sol pero sol abrió la puerta de la casa y vio a luna secando sus lagrimas y pensó lo peor, un poco asustado por el estado de luna, sol la dejo pasar, la sentó en un sillón y luna le contó todo lo sucedido 

~~~~~~|Con sol|~~~~~~

Luna: ¿¡¿que voy a hacer ahora?!? *Llora con su cara posada entre sus manos*

Sol: tranquila, hiciste lo correcto *le acaricia la espalda a luna*

Luna: ¿t-tu crees? *Voltea a ver a sol con ligera sorpresa*

Sol: por supuesto *sonriendo dulcemente*

Luna: no me mientas, si hubiera hecho lo correcto no estaría pasando esto *deprimida*

Sol: tu sabias que iba a pasar algún día *abraza a luna*

Luna: pero no hoy *lo abraza y susurra* ya no se que hacer *comienza a llorar*

Sol: tal vez... *suspira* tal vez es hora de dejarla ir, que conozca el mundo *con una ligera sonrisa*

Luna: ¿tu crees que Ōkami este lista para ir allá? 

Sol: ¿Ōkami? ¡por supuesto! quien no esta lista es "otra persona" *le toca la punta de la nariz juguetón*

luna: ja ja muy gracioso *sarcástica*

Sol: solo piénsalo *le da una pequeña palmada mientras se levanta de la silla sonriendo*

luna solo bajo la cabeza para sumirse en sus pensamientos mientras sol se retiraba lentamente a su habitación pero antes de salir de la habitación para de caminar y sin voltear a ver a luna decirle 

Sol: a veces hacer lo correcto duele, pero debes ser fuerte... *Sigue caminando*

Luna: *voltea a ver a sol irse pensando en lo que le dijo sol* ~tal vez es cierto, tal vez es hora de dejarla ir~

Luna se levantó del sofá y fue hasta su casa, al llegar Ōkami estaba en su cama durmiendo estaba hecha una carne de res marinada en una salsa dulce acompañado de unas papas a la francesa y una ensalada en plato blanco con decoraciones doradas en forma de flores hojas y plantas variadas sobre un mantel azul claro, un jarrón de cristal con unas flores artificiales de colores pálidos y una nota al frente del plato que decía simplemente "lo siento" 

Después de comer, luna fue al cuarto de Ōkami la cual dormía y solo se sentó a observarla dormir con algo de nostalgia mientras decidía que iba a hacer al día siguiente y como se lo tomaría Ōkami

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