"Lo que pasa en las noches"

Empecemos por el principio

Mi nombre es Sara Garcia y voy a contar los dramas de mi vida. Las desilusiones y decepciones (principalmente amorosas) que me llevaron a no creer en el amor. A beber y tener sexo para olvidar.
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Yo ya no creia en el amor gracias a todas las decepciones que me habia llevado anteriormente. Siempre me habia salido todo mal en ese sentido ya que o me utilizaban o no se porque mi corazon era capaz de enamorarse cuando la persona si que era la correcta. Pero esta vez presentia que todo seria distinto puesto que con el sentia una especie de confianza que nunca habia sentido con nadie. Tambien podria ser que tuviera algo que ver con que las dos veces que nos habiamos visto yo iba borrachisima pero se sentia algo distinto, una atraccion muy grande. Aun asi tenia claro que enamorarme no estaba entre mis planes, yo solo queria dejarme llevar y disfrutar.
-ha llegado a su destino- la voz del gps del coche me hizo salir de mi trance, y al levantar la vista del volante me di cuenta de que estaba al lado de una hermosa zona a las afueras de la ciudad, con unas vistas increibles a la derecha y algunas casitas bastante normales a la izquierda. Justo enfrente de mi, en lo alto de una colina se situaba una casa mas grande que todas las demas.
-veo que ya has llegado preciosa- dijo con su ronca voz detras de mi mientras posaba una de sus manos en mis caderas, lo que hizo que me estremeciera con su toque.
-asi es, ¿entramos? Estoy algo cansada del viaje- dije yo con una sonrisa mientras depositaba un leve beso en su mejilla.
El asintio y subimos la colina. Una vez alli pude ver mas de cerca la casa de madera, con unas vistas espectaculares de toda la ciudad a un lado y el mar no muy lejos al otro.
-que princesa, ¿impresionada?- rio el al ver mi cara de asombro por todo aquello.
- no podria haber mejor sitio para pasar el fin de semana-sonrei
-ni mejor compañia- susurro el en mi oido cuando pase a su lado.
No pude evitar sonrojarme a lo que el me respondio guiñandome un ojo.
Tenia un presentimiento de que se venian un gran fin de semana, y bastante... movidito...