Mi dulce vixen.

Capitulo 15

Sasuke sacude la cabeza mientras vuela hacia los sonidos de la batalla. Sabía que su Vixen quería pelear y normalmente, Naruko era un activo maravilloso en tiempos como estos. Esto no era normalmente sin embargo.

"No la voy a dejar pelear, si hay alguna posibilidad de que esté embarazada". Las palabras fueron dichas tan suavemente, que Sasuke casi dudaba que en realidad hubiera expresado el pensamiento en voz alta mientras seguía corriendo.

Naruko estaría bien en el Sitio de Evacuación. Él lo sabía. Para eso fueron. Estaban allí para proporcionar un escondite necesario para aquellos que no podían luchar. ¡Lo cual era bueno porque en la mente de Sasuke, una mujer potencialmente embarazada definitivamente no debería marcharse a la batalla!

"¡¿Que demonios?!" Mientras se acerca al campo de batalla, Sasuke escucha la voz de su aturdido hermano.

No pasó mucho tiempo para averiguar cuál era el problema. Su enemigo numerado en los cientos. Eso hubiera sido suficientemente malo, ¡pero casi la mitad de ellos eran él !

Parecía que había hecho cientos de clones, pero Sasuke no podía recordar haberlo hecho. Y seguramente no estaría atacando a sus amigos, a su familia y siguiendo a los aldeanos de esa manera.

"CHIDORI!" Todos sus ataques de marca estaban siendo llamados por sus "clones".

Lion Barrages, Chidoris, el sonido de sus espadas balanceándose, y más. Había llamas negras emergiendo en el campo de batalla. Era inquietante por lo menos.

¡Choque! ¡Sonido metálico! ¡Crujido! Los sonidos de kunais, espadas y otras armas se podían escuchar en todo el campo de batalla, y mucho más inquietantes. Los sonidos de hombres y mujeres heridos e incluso de ellos muriendo.

El olor a humo y sangre colgaba pesadamente en el aire. Sasuke parpadea mientras observa a uno de los Ninja de la Hoja clavar una espada a través de "él", pero algo extraño sucedió. El clon grita de dolor y cae al suelo.

No desapareció. Los clones no eran tan duraderos. Un golpe y normalmente fueron disipados. Algo muy extraño estaba pasando.

"Veo que lo has descubierto". De repente, Sasuke no estaba solo. "Se ven tan reales, ¿no?" ¡Alguien estaba detrás de él!

¡Inmediatamente, se da vuelta y se enfrenta a Orochimaru! ¡Maldición! El legendario Sannin que había sido expulsado de la Hoja hace años. El que era conocido por llevar a cabo experimentos médicos en humanos. Todo estaba empezando a tener sentido ahora.

Sus ojos se estrechan y sangran de rojo rubí con rabia. "No sé lo que hiciste, pero no me importa". Orochimaru iba a pagar. "¡Has hecho que pareciera que decidí atacar esta aldea y eso es imperdonable!" ¡Él iba a hacer que esta abominación de un ninja pague! ¡Y pagar caro!

Mientras tanto Naruko espera en la cueva con los demás. Otras personas que no pudieron encajar. Los jóvenes, los ancianos, los enfermos, algunos civiles y, por supuesto, mujeres embarazadas. Había una posibilidad de que ella cayera en el último grupo y esa era la razón por la que estaba esperando aquí.

"Sabes que tu compañero tiene razón". Quedando burlado por el desorden como Sasuke tan amorosamente llamó Kyuubi. "No debes pelear, si existe la posibilidad de que estés esperando tu primer kit".

Lógicamente, la mujer rubia sabía que Sasuke y las Nueve Colas tenían razón. Ella no debería pelear. No cuando ella no sabía, si estaba o no estaba embarazada. Aunque fue tan difícil.

"Lo sé, ¡¿pero no puedes escucharlos?" ¡Los gritos de sus camaradas! "¡Me está volviendo loco! ¡Podemos ayudar! ¡Sé que podemos!" El olor del fuego estaba por todo el pueblo.