Ley de la gravedad (Kacchako)

Capítulo 1

 No parecía haber señales de que el sol fuese a salir aquel día. Unas nubes cubrían todo el cielo tornándolo de color oscuro, el aire se notaba más frío de lo normal y la lluvia amenazaba con caer en cualquier momento. Dentro de una pequeña habitación un despertador no paraba de sonar, esperando que Bakugo decidiese levantarse al fin. Suspiró. Había pasado toda la tarde entrenando y todavía se sentía cansado. Anhelaba poder quedarse y dormir un rato más, pero sabía que Kirishima y Kaminari vendrían hasta su puerta y la tirarían abajo de ser necesario para obligarlo a desayunar. Desganado y aún medio dormido se levantó de la comodidad de su cama, se lavó los dientes, se puso su uniforme y salió.

— Ahí está nuestro campeón. Buenos días —lo saludó Kirishima, animado— ¿Cómo dormiste?

—Cállate si no quieres que te explote la cabeza ahora mismo.

—Uy, alguien se despertó de mal humor hoy — bromeó Kaminari —. Debe haber perdido contra Midoriya en sus sueños.

—¡ESE ESTÚPIDO NO ME GANARÍA NI EN MIS SUEÑOS, IDIOTA! —le gritó mientras pequeñas flamas salían de sus manos. 

Ambos chicos rieron y decidieron dejar de molestarlo por el momento. Sabían que si se pasaban de la raya (más de lo que ya se pasaban molestándolo desde tan temprano) los explotaría, y se dirigieron a desayunar mientras reían por lo bajo de la cara irritada de Bakugo por sus chistes matutinos. Iba a ser un buen día para todos. O para casi todos.

  — ¡¡BUENOS DÍAS ALUMNOS!! — gritó Present Mic mientras entraba al salón.

Todos soltaron un gran suspiro (por el cual Iida los regañó, argumentando que no era forma de recibir a un profesor) y saludaron a aquel ruidoso hombre. Empezar las mañanas con él gritando no era de lo mejor.

— Sé que todos estaban esperando tener una divertida clase sobre tiempos verbales — bromeó—, pero los profesores y yo consideramos que se merecen un respiro del constante estrés al que están expuestos, así que vamos a hacer algo diferente. ARE YOU READY??


Silencio. Todos se miraron entre sí, esperando algún tipo de explicación.

— Dije: ARE YOU READY??

— ¡SI PRESENT MIC! —gritaron todos al unísono.


— Bien, así me gusta —sonrió—. Esto será como un mini proyecto. Cada equipo consistirá de parejas de dos ya elegidas por mí. Empezando hoy y hasta un plazo máximo de dos semanas, cada pareja deberá representar una escena teatral por al menos diez minutos. Pueden elegir actuar alguna escena ya existente, como, por ejemplo, alguna de Romeo y Julieta, o pueden inventar y contextualizar una ustedes, lo cual les dará puntos extra. No tienen que esforzarse demasiado en vestuarios ni escenografía, pueden simplemente traer escrito en un papel la escena que van a actuar para ponernos a todos en órbita. Como ya dije, este ejercicio será puntuado pero es totalmente subjetivo. Con que el tiempo de actuación no sea mínimo a diez minutos todo está bien. ¿Alguna pregunta?


Las expresiones de toda la clase eran enmarcables. Se miraban los unos a los otros confundidos. ¿Habían escuchado bien? ¿Una obra de teatro? Jamás se hubiesen imaginado que entrar a la academia de héroes más prestigiosa sería sinónimo de tener clases de teatro.

— ¡Disculpe profesor! —gritó Iida, moviendo sus brazos de forma rara como siempre hacía—, ¿no cree que perderemos mucho tiempo con este proyecto? Tendríamos que centrarnos en mejorar en combate para así poder pelear contra villanos.


— Como si yo fuese a gastar mi tiempo en hacer una estúpida obra con alguno de estos extras aquí —espetó Bakugo.


— Con esa actitud podrías actuar una escena de La Bella y la Bestia, te queda perfecto el papel—le dijo al rubio explosivo y toda la clase rió. Él sólo bufó y se reclinó en su asiento, fastidiado. —No se preocupen, no les va a tomar demasiado tiempo y tienen hasta dos semanas para prepararlo. Pueden seguir con su entrenamiento tranquilamente y, al mismo tiempo, divertirse con este proyecto. Pero para aquellos que están realmente preocupados, piensen que no necesitan gastar tiempo extra. Pueden hablarlo durante el almuerzo y cena y así no estarían perdiendo tiempo.


La clase se veía animada ante la idea luego de que Present Mic los reconfortara. Reían pensando en lo ridículo que sería actuar y discutían si valía la pena gastar tiempo en armar una mini obra ellos mismos. Bakugo, por otro lado, insultaba a todo y todos en voz baja ya que todo este revuelo suponía menos tiempo de entrenamiento y más tiempo compartido con algún extra. Sin mencionar que tendría que pasar tiempo practicando sus líneas y planeando un estúpido proyecto sin fin alguno.

— Bueno, bueno, ahora anunciaré a las parejas. Tsuyu Asui y Fumikage Tokoyami, Shoto Todoroki y Momo Yaoyorozu, Mina Ashido y Eijiro Kirishima, Kyoka Jiro y Denki Kaminari, Izuku Midoriya y Tenya Iida, Hanta Sero y Minoru Mineta, Yuga Aoyama y Toru Hagakure, Mashirao Ojiro y Koji Koda, Rikido Sato y Mezo Shoji y Katsuki Bakugo y Ochaco Uraraka. La idea era que que fuesen un chico y una chica pero, como verán, son más chicos que chicas. Espero que esto no les cause complicaciones a algunos y, si lo hace, siéntanse libres de venir y platicarlo. Pueden usar este tiempo que nos resta para empezar a discutir y organizar todo con su pareja. ¡Eso sería todo!

Bakugo suspiró de la frustración. De todas las personas en la clase lo habían emparejado nada más ni nada menos que con la señorita "amo a Deku". Claro que era mejor a que lo emparejaran con el mismísimo estúpido de Deku o con cara mitad y mitad, pero de todas formas la idea de tener que pasar tiempo extra con ella y su constante felicidad y admiración por el estúpido lo irritaban, tanto como para explotar algo en ese momento.

Por otra parte, el peliverde no podía evitar preocuparse por Uraraka. Conocía el temperamento y la poca paciencia de su amigo (si es que podía llamarlo así) y la idea de que pasase tiempo a solas con él no le agradaba ni un poco.

— Puedo pedirle a Present Mic que nos cambie de parejas —le dijo, nervioso—. Estoy acostumbrado al mal temperamento de Kacchan y puedo sobrellevarlo.

Uraraka le sonrió. Apreciaba que se preocupase por ella.

— Está bien Deku kun, puedo arreglármelas sola. Gracias de todas formas.

Intentó sonar lo más convencida posible, pero la realidad es que no estaba tan confiada. ¿Podría lograr manejar a Bakugo y su indomable odio hacia todos? ¿Podría evitar que la terminase explotando? ¿Podría siquiera llegar a verlo después de clases para organizar todo? ¿Podrían siquiera cruzar dos palabras en tranquilidad? Miles de preguntas similares cruzaban por su mente y, por un segundo, reconsideró la oferta de Deku. "Tranquila" se dijo a sí misma "tú puedes". Miró fijamente a Bakugo por un momento. Respiró hondo, dejó el aire salir, puso su mejor cara de determinación y se acercó al asiento del explosivo.

— Buenos días Baku-

Pero antes de que pudiese terminar la interrumpió.

— Escúchame cara redonda —le dijo, mirándola fijamente—, no tengo ganas de escuchar tu adorable voz desde tan temprano. Búscame en el área común a las cinco de la tarde. Sé puntual.


Y, sin decir más, le dio la espalda y se puso a anotar en su libreta.

Uraraka regresó a su asiento. Iida y Deku la miraban con una expresión preocupada. Ella les sonrió y les levantó el pulgar para asegurarles de que todo estaba bien. Realmente había salido mejor de lo que esperaba, pero ese era sólo el principio. Suspiró. Iban a ser unas largas semanas.  

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Si les gusta el primer capítulo prometo escribir más en el siguiente <3 espero que, al menos, la trama les esté agradando.