Por fin llegó el día donde Lisa comenzaría las clases en la escuela primaria de Seúl. Amber y Chaeyoung estuvieron semanas buscando una buena escuela para que su hija asista, y tenga las mejores enseñanzas.
–¿Lista, cariño?.-Pregunta Chaeyoung mientras acomodaba el moñito color celeste que su hija tenía en su cabello.
Lisa asiente.–Lista, mami.-Sonríe, mostrando aquella misma sonrisa que heredó de Amber. Segura, coqueta y amable a la vez.
La rubia baja a su hija de la cama, y de la mano la lleva hasta la cocina, dónde seguramente su esposa estaría haciendo el almuerzo.
–¡Buenos días, appa!.-Saluda alegre Lisa, corriendo a donde la tomboy.
Amber se agacha, y la alza en sus brazos.–Hola, mi hermosa princesa.-Besa el puente de su nariz.–¿Cómo estás al saber que es tu primer día de clases en la primaria?.-Curiosa, sentándose en su sillita de niña.
Lisa se encoge de hombros.–¿Nerviosa?.-Ladea la cabeza, viendo a su omma colocarle el desayuno frente a ella.
Chaeyoung ríe.–¿No sabes cómo estás?.-Se sienta a la izquierda de su hija.
La pequeña niega.–Soy una niña, por lo concierne no sé lo que deba sentir.-Se cruza de brazos.
La tomboy sonríe, ya que la forma de hablar la imitó de la enfermera, tan prolija y educada.
La familia Liu comenzó con el desayuno, obviamente que las dos mujeres le explicaban a Lisa de cómo debía comportarse y tratar a los demás.
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Un precioso auto Ferrari-GTC4 Lusso aparca frente a la escuela primaria.
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De allí se abren las puertas, y tres personas salen de ella; una de 28 años, la otra de 27 años y una pequeña de 5 años.
–Bueno... aquí estamos.-Halega Amber, metiendo sus manos en los bolsillos, caminando a la entrada.
Chaeyoung tenía a su hija en upa, caminando al lado de su esposa.–Por lo que ves, es bonito, ¿No, Lisa?.-Pregunta alegre.
Lisa asiente.–Parece un lugar muy...-Al ingresar, queda maravillada.–¡Es muy bonito, omma y appa!.-Chilla alegre.
La enfermera baja a su hija de sus brazos, y la pequeña corre de inmediato alegre a donde estaba un señor con una pancarta que decía 1A.
–Está muy alegre con asistir a clases.-Comenta Amber, rodeando los hombros de su esposa con su brazo izquierdo.
Chaeyoung asiente, apoyando su cabeza en el pecho de su tomboy.–Me alegro que así sea.-Sonríe, cerrando levemente sus ojos.
Y es cuando un hombre se acerca, alto y apuesto, a pesar de sus canas se lo veía que se conservaba.
