Jongin se marchó de la tienda dejando a Kyungsoo triste, lo había notado, le pidió que se quedara con él, que fuera a cenar con su familia, había sido un detalle muy bonito, sabía que lo decía de corazón, pero todo esto le asustaba, no sabía cómo actuar, el miedo a tener esos sentimientos hizo que declinara esa invitación, todo iba demasiado precipitado, demasiado rápido.
Se giró para mirar la librería antes de montar en su coche, se puso al volante y se marchó, ya llevaba diez minutos de camino pensando en Kyungsoo, de repente pisó el freno en seco en la carretera y se dio la vuelta, ¿porqué no pensar solo en lo que deseo y dejar mis miedos?¿porqué no intentarlo?, se dijo, si lo intentaba no se diría porque no lo hizo, Kyungsoo era un gran chico, quizás era la persona que estaba buscando, nunca se había sentido así con nadie, aunque no sabía que le iba decir, solo iba a intentarlo.
- - o - -
Kyungsoo se había quedado con una gran tristeza, quizás debería haberle dicho todo lo que sentía a Jongin, pero era todo tan precipitado y no habían hablado nada de sus sentimientos, debería haberlo intentado, ahora al principio se llamarían o escribirían, pero con el tiempo no iba saber más de Jongin, la distancia hace el olvido, como dice el dicho.
En ese momento sonó la puerta, miró hacia allí y encontró que era Jongin.
-¡Jongin!, q-qué haces aquí, ¿se te olvidó algo?
-Acepto, acepto ir a esa cena contigo, como tú pareja, amigo o lo que quieras, seré tu acompañante.
-¿De verdad?
-Claro, si aún sigue en pie la oferta.
-Si-sigue en pie, voy a cerrar y nos vamos a mi casa para prepararnos para la cena, hoy serás mi invitado y no puedes decir que no.
-Vale, está bien, - dijo sonriendo, estaba nervioso y feliz a la vez.
Una vez en casa de Kyungsoo se pusieron cómodos hasta que llegara la hora de la cena, Kyungsoo avisó a su hermana de que llevaría compañía, ya le había hablado de Jongin durante estos días y estaba muy feliz por su hermanito, le dio ánimos para que se le declararse.
Y así era, Kyungsoo iba aprovechar para declararse, iba a echar el resto y arriesgarlo todo a la carta más alta como al póker que tanto le gustaba jugar con sus amigos, quizás tenía que hacer caso al destino y pensar que en navidad los sueños se cumplen, había soñado tanto con encontrar a su media naranja y Jongin podía ser esa media naranja, aunque se conocieran de hace solo unos días, pero lo sentía, esta vez no iba a dejar marcharse a Jongin sin decirle lo que sentía.
-Jongin, se que puede ser precipitado, pero al quedarte puedo pensar...he notado que tú...yo...conectamos en el amplio sentido de la palabra.
-Así es, lo siento y por eso he vuelto.
Kyungsoo sonrió - tengo que confesarte, no me voy andar con rodeos...me gustas Jongin, me gustas mucho, lo siento aquí dentro, - dijo tocando su pecho, señalando su corazón.
Jongin se le quedó mirando fijamente durante unos segundos y respondió sin pensar.
-Y tú a mí me gustas mucho, si he vuelto es porque no solo quiero una llamada, quiero más, si tu también lo quieres, como dices para mí también puede ser precipitado, pero durante estos días nos hemos ido encontrando y conociendo poco a poco, no sé si será el destino el que ha tenido que ver, pero me atraes y me gustas de una manera que nunca me sucedió con nadie, siento una conexión contigo muy fuerte.
-Yo también, deseo que nos conozcamos más, también estoy sintiendo cosas fuertes que nunca había sentido por nadie, siento que esto puede ser grande entre nosotros, nos gustamos y quizás pueda ser...
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Y llegó el amor en Navidad (KaiSoo)
FanfictionDo KyungSoo vivía en una pequeña ciudad de Corea del Sur, donde regentaba una librería, desde hacía unos años odiaba la navidad por circunstancias que le habían sucedido en esa época del año, pero la llegada del un periodista llamado Kim JongIn a...