- Nuestda mami es e más gwandioso hedoe de la histodia!!! - [Tododeku]

Tal vez, pequeño.

Si se que me he tardado casi dos semanas, chispas.......quería traducirlo entre comienzos de esta semana pero me dejaron tarea ;-; y mi madre que no me deja dormir mas allá de las 10 pero bueno, espero que disfruten el capitulo :,3

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Para Midoriya Izuku, no es el sonido de la alarma lo que le despierta a tempranas horas de la mañana. Ni eso, ni la luz del sol brillando fuertemente a través de su ventana, o el suave canto de las aves; dan inicio a su día.

Eso sucede cuando siente como uno de sus hijos se sube a su cama y empieza a saltar por toda ella, mientras exclama con todas sus fuerzas – Mami! MAMI! ADIBA! DEVÁNTATE! ODA DE LOS HEDOES! ODA DE LOS HEDOES!

Con un ligero quejido, el Omega tanteo alrededor con su brazo extendido, y como es costumbre, agarra al niño y lo echa a su lado, donde lo envuelve en un fuerte abrazo mientras le llena la cara de besos. En cuanto al niño, empuja como puede contra el pecho de su madre, tratando de resistirse

– MAMI!! – estruja al pequeño en sus brazos mientras este se retuerce – NO MIMOS! ¡DEVÁNTATE!

– Pero Kouo, es temprano...

– MAMI! ODA DE LOS HEDOES!

Izuku suspira y se enrosca de nuevo en su almohada –Bien, me estoy levantado, me estoy levantando– un bostezo – Dale a mami un minuto.

– No! Pada entonses va a tedmina!– Se las arregla para escapar de las garras de Izuku, sólo para agarrar su mano y jalar –¡Vamos! ¡Aoda mimo! ¡deplisa! ¡deplisa!

Izuku ríe, recordando vagamente que solía ser así también, y decide levantarse a regañadientes del cálido abrigo de sus sábanas.

– Bien, bien – Dice con otro bostezo –ve y enciende el televisor de la sala. Dile a ma- digo, a la abuela, que lo ponga en tu programa, de acuerdo?

Su única respuesta es un animado grito mientras su pequeño sale corriendo de su cuarto, sus pequeñas piernas hacen que sus pies suenen como tambores a medida que corre por el piso de madera. Justo en el momento en que sale, su otro hijo entra tambaleándose, aún medio dormido va de un lado a otro, con el pelo desordenado, abrazando su manta junto a su carita mientras tiene el pulgar dentro de su boca. Él choca contra la cama, luego se las arregla para meterse en ella y después acurrucarse entre los brazos de Izuku.

– Koutan es... ruidoso – murmura Yukio con el pulgar en la boca, Izuku acaricia su cabeza y tira del pulgar, que al instante se deja caer a un costado.

– Sabes que le gusta ver Noticias Heroicas por las mañanas.

–...¿Héroe?

–Ya sabes, ese programa que les gusta ver a ambos. Lo ven por la noche y por la mañana, donde salen varios héroes– mira el reloj, y empieza a levantarse –Comienza en cinco minutos. No te lo quieres perder ¿verdad?

– Uh-uh – Yukio empieza a salir también de la cama, pero tiene mucho sueño, y se deja caer de vuelta a la cama. Izuku rueda los ojos mientras se para, y decide vestirse para el día de hoy. Nada especial, sólo unos jeans y una camiseta, una vez termina de peinar su rebelde cabello en su cuarto de baño, se vuelve para ver que Yukio ha rodado, y ahora está levantando sus manos, deditos abriéndose y cerrándose en dirección a Izuku. Toma a su pequeño, con manta y todo, en sus brazos, y juntos van a la sala, donde puede ver a un emocionado Kouo saltando de arriba a abajo delante de la televisión y su madre, sentada en el sofá mientras se ríe por la impaciencia del niño. Izuku se inclina sobre el respaldo del sofá, pone a Yukio en el cómodo regazo de Inko, y besa la cabeza de su madre.