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CAP 21 DOSIS DE AMOR

Narra Natalia

Sentada en aquella terraza con los ojos cerrados, recordando uno a uno los momentos que había vivido con Alba, no sabía si mi plan iba a servir no sabía si llegaría o sería el último cartucho que había perdido.

Sentí como alguien me arropaba con una manta, abrir los ojos y allí estaba

Alba: Vas a coger frío.

Natalia: A....A...Alba, ¿Estás aquí?

Me quede tan en shock que había hecho un Marta y no me había dado cuenta.

Alba: ¿Acabas de hacer un Marta?

Natalia: Pues supongo... Que dos que duermen en la misma habitación se vuelven de la misma condición.

Alba pego una carcajada y yo la seguí.

Alba: Creo que así no es el dicho....

Me daba exactamente como fuera el dicho yo solo quería besarla, me acerque a ella y la arrope con la misma manta y ella se acerco a mí, me dio una palma en el muslo.

Alba: Aqui estamos.

Natalia: ¿Porque has venido?

Muy bien Natalia qué gilipollas que eres eh ¿eso preguntas?, se giró con las cejas fruncidas, como extrañada por mi pregunta.

Alba: Me has citado aquí a la una y media.

Se miro el reloj que yo le había regalado, !Si!
Lo llevaba puesto.

Natalia: Te queda muy bien el reloj.

Alba: Gracias, pero no es lo único que me han regalado.

Natalia: ¿Enserio? Bromeé.

Alba: Enserio.

Suspiró pero tan profundo que la escuché.

Natalia: ¿Que pasa?

Alba:  Qué tengo la habitación que parece el cumple de una bebe de tres años, con tantos globos.

Natalia: Pues si te contará que tengo los pulmones de una señora mayor, que me quedando sin aire.

Alba: ¿Quieres venir?

Se levantó y me tendió la mano.

Natalia: ¿A dónde?

Alba: A que te de un poco de aire.

Sonreí tanto, y ella me devolvió la sonrisa me agarró con su mano a la mía y nos fuimos hacia la habitación. En todo el trayecto no sé por qué pero no podía ni hablar, ella tan poco. Llegamos a la habitación, cuando vi todos los globos tirados por el suelo me entro la risa, ella se giró en plan gruñona, pero siendo una bebé

Alba: Jo, Nat no te rías, a mí no me parece gracioso tener tantos globos en mi habitación y esto ha sido cosa de Juls y Sabela.

Me acerque a la cama y me senté, ella me miraba de pie.

Natalia: No, no,no las culpes a ellas porque ellas no tienen la culpa la culpa es mía yo he hecho todo esto.

Observe toda la habitación.