Lost In The Echo

Capitulo 2

Caminamos hasta un pequeño riachuelo con agua fresca y moja uno de sus pañuelos, después lo envuelve en mi pie con varias capas. Noto como el dolor recorre todo mi pie y la sangre coje un color rosáceo al mezclarse con el agua, los pañuelos de Mike se tiñen de rojo. Por un momento quiero irme de allí, cuando caminaba no me dolía tanto aunque se abrían mas y mas hasta juntarse incluso con otras de mis heridas. Dos preguntas recorren mi mente: ¿cómo habría podido hacerme aquello? y ¿por qué Mike, un chico desconocido, me estaba ayudando? Aparte de las principales dudas como el qué hago aquí o el cómo he llegado y por qué.

-No soy tan vulnerable, ¿sabes? -digo entre quejidos por el dolor que causa el agua en mis heridas.

-¿Y quien dijo que lo fueras? No se a qué viene esto ahora. -Responde, muy serio, más que de costumbre.

-No sé por que me estás ayudando pero sea por lo que sea no me gusta que lo hagas, sé apañarme yo sola y me refiero a que no necesito que esté alguien me trate como un bebé inútil. -Intento mantener la seriedad en el tema para que no piense que estoy de broma.

-Te estoy ayudando porque no se qué hace aquí una chica con los pies cubiertos de heridas y sangre que no recuerda nada de lo que ha hecho y solo sabe que ha despertado aquí, según ella. -dice con aire de superioridad, no sé por qué pero hay algo que no me gusta en él.

Acepto su respuesta y me callo, pienso en que podría haber considerado la opción de ignorarme y dejarme perdida pero en vez de eso decidió ayudarme así que mi conciencia se siente mal por haberle hablado de esta manera. Descubro algo sobre mí, soy algo egoísta por lo que le he hecho y pensando en mis cualidades y defectos me doy cuenta de que no me conozco ni a mi misma. Es como si acabase de nacer, con cuerpo de adolescente pero sin ningún recuerdo del pasado. ¿Me habré dado un golpe perdiendo así la memoria? Pero si fue así, ¿qué hacía en este bosque? Decido buscar pistas.

-Uhm... perdón por el comentario de antes, resultó muy egoísta. -miro al suelo algo avergonzada y continúo. Él asiente con la cabeza en señal de disculpa aceptada.- Y tu... ¿vives aquí, en el bosque?

Ríe y niega con la cabeza mientras continúa limpiando las heridas de mi otro pie. Me mira y comienza a hablar, con gesto divertido.

-¿Cómo voy a vivir en un bosque? -vuelve a reír- No, vivo en un pueblecito que esta como a 3 kilómetros de aquí. Suelo venir aquí porque como te conté antes, a la gente le da miedo este sitio y vengo para estar solo. No me gusta la gente.

-¿Entonces por qué te has ofrecido a ayudarme? -pregunto algo dudosa- Si según dices no te gusta la gente no deberías haber hablado conmigo.

-No todos los días encuentras a alguien en un lugar que parecía vacío con los pies ensangrentados y que no recuerde nada. 

En eso tiene razón, no todos los días te encuentras a este tipo de gente pero si yo hubiera sido él reconozco que hubiera huído. No sabe lo peligrosa que puede resultar una persona que te encuentras. Descubro algo más sobre mí, me gusta analizar las cosas con detalles. Eso podría ayudarme mucho a la hora de buscar pistas pero hacerme perder mucho tiempo a la hora de reaccionar rápido. Creo que he vuelto a hacerlo.

Mike acaba de limpiar las heridas y decido beber un poco de agua. Necesito comer algo, estoy hambrienta. ¿Cuánto tiempo llevaré sin comer? Busco peces en el riachuelo o algo que llevarme a la boca pero no lo encuentro. Parece que en este bosque no hay absolutamente nada. Él tampoco lleva ningún bolso o mochila así que descarto la idea de preguntarle sobre comida. Me mojo la cara con las manos y noto como el frio recorre cada parte de mi tez blanca y fina. El chico me completa y me imita mojándose así la suya.

-Me gusta tu sudadera, ¿escuchas ese grupo? -vacila y añade- Bueno, no sé por qué lo pregunto si llevas su logo en la sudadera pero como ahora lo llevan por moda.

Miro el logo sin decir nada, una especie de estrella roja con letras blancas alrededor en las que se lee "Red Hot Chili Peppers", no lo conozco no se qué es. Ni siquiera sé por qué la llevo.

-No sé qué es este logo. -me mira perplejo- ¿Qué es la música? 

Se queda callado un momento mirándome sin pestañear. No puede creerse lo que le acabo de decir y no se por qué, no lo veo tan raro, ¿tan conocido es eso a lo que llaman "música"?

-La música es... -se queda pensando un momento- digamos como una serie de sonidos que suenan agradables al oído. Luego existen varios tipos y a cada uno le gusta un estilo. Espera un momento, tengo una idea. 

Saca un teléfono móvil y pone una melodía que según él se llama canción. Me indica el nombre y el artista, que resultan ser los del logo de mi sudadera. Es una canción bonita, se titula Porcelain y es lenta y agradable para mis oídos, como él decía. Mike empieza a canturrear mientras me agarra y la inercia me obliga a apoyar mi cabeza sobre su hombro mientras la canción suena en su pequeño altavoz. Me fijo en su rostro, tiene unos ojos preciosos y el pelo suave como las nubes. Me fijo en sus pequeñas pecas marron claro, en sus carnosos labios anaranjados y poco a poco voy callendo en una especie de sueño hasta que la canción acaba y la siguiente me despierta totalmente de mis pensamientos. Me sobresalto un poco y él se da cuenta y ríe. Le obligo a poner de nuevo la canción de Porcelain y esta vez me duermo en su hombro.

Despierto en el suelo entre piedrecitas y hojas secas de árboles. Me ruje el estómago y mis heridas amenazan con volverse a abrir. Me incorporo e intento asimilar lo que ha pasado el tiempo que he estado dormida. Busco a Mike pero no hay rastro de él; ni en los alrededores, ni en el riachuelo, ni en el sitio donde lo encontre. No había rastro del chico del bosque. Me enfurezco y me aterro, entro en una especie de ataque de pánico. Intento tranquilizarme diciendo que quizá me esté precipitando hasta que pasa bastante rato y lo doy todo por perdido. ¡Mierda, mierda, mierda! Eso me pasa por confíar en la primera persona que encuentro y justo cuando había empezado a creer en él. Grito lo mas fuerte que puedo hasta que mi cuerpo cae al suelo y comienzo a llorar.