No seas mi amiga

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La mañana siguiente July condujo en su coche rojo hacia la escuela. Todo el camino su estómago rechinaba con nerviosismo y tratando de calmarse subió el volumen de la música. Al llegar se estacionó cerca de un bonito coche negro en el cual notó se encontraba la chica de cabello azul.

Un chico de pequeña estatura, y complexión delgada se acercó al coche y jugando tocó la ventana. En el miento que la ventana comenzó a descender, un penetrante olor a cigarro comenzó a salir.
-¡Genial Victoria, ya te regresaron tu coche!- dijo el delegando muchacho.
- Si, al fin mi mamá creyó que sería prudente que manejara.- dijo Victoria girando los ojos hacia arriba.
El chico notó que July los miraba y preguntó -¿La conoces?-
Victoria se asomó fuera del coche para poder ver y July al notar eso camino rápidamente hacia la escuela.
- Va conmigo en historia. ¡El primer día ya era víctima de Sarah! Eso es un récord, yo me tardé medio año en que me odiara.- dijo Victoria riendo y apagando su cigarro.

El día fue largo para July y parecía no ser mejor que el anterior. Llegó la hora del receso y la chica nueva ya no quería estar sola por lo que recorría la escuela con una manzana en la mano. Nadie parecía ser amigable y le daba pena acercarse con cualquier persona pues tenía verse como una chica rara. Los rostros se dividían en gente que la ignoraba y gente que parecía burlarse de ella. Comenzó a costarle trabajo respirar y sentía como si las paredes del pasillo de achicaran y los ecos de las voces de los estudiantes retumban en su cabeza. Comenzaba a tener un ataque de ansiedad, por lo que buscó el baño más cercano y entró como si alguien la estuviese persiguiendo.

Al entrar encontró a Victoria, quien retocaba delicadamente su labial vino. La chica de cabello azul la miró de reojo y continuó con su maquillaje. July comenzó a tranquilizarse y se miraba al espejo tratando de regresar en si.
-¿Estás bien?- preguntó Victoria viendo a July por el espejo.
-Si, ya estoy mejor. Solo fue un pequeño ataque de ansiedad, aveces me pasa.-
- Te entiendo, igual me dan.-
No dijeron nada por uno segundos y con temor a seguir sola, July decidió seguir la plática.
-¿Vas en mi clase de historia, cierto?-
A lo que Victoria contestó con un seco y cortante "Si". July ya no sabía que más decir y antes de que Victoria saliera le dijo -¿Puedo ir contigo? Realmente no tengo ningún amigo y me hace falta conocer un poco más la escuela.- Victoria de detuvo y camino lentamente hacia July, quien temía sus palabras habían sonado muy desesperadas.
- No quieres ser mi amiga, no seas mi amiga. Es por tu bien, aún tienes tiempo de crear una buena impresión para todos estos hipócritas.- dijo  Vitoria con una mirada fuerte y de seriedad.
-Eres la única que ha hablado conmigo y pareces una chica interesante. No entiendo, quizá no te agrado. Solo dilo, está bien.- dijo July tartamudeado.
- ¡No es eso! No te conozco, no puedo juzgarte. El problema es que yo soy la porquería de ésta escuela y no quiero arrastrar a alguien a esto. Puedes juntarte con cualquier grupito, aunque sean rechazados y no la pasarás tan mal. ¡Tienes la oportunidad de empezar desde cero! ¡Nadie te conoce! Aprovéchalo, no empieces con el pie izquierdo. No soy una persona que te pueda ayudar a hacer amigo, estoy sola.- dijo Victoria mientras miraba a July directo a los ojos.

July se quedo pasmada y no sabía que decir. Sentía que sería imposible hacer amigos y Victoria parecía no ser muy diferente a Sarah pues también la había hecho sentir mal. Victoria al terminar sus palabras salió del baño acelerando su paso.

Ya en la tarde July guardaba sus cosas en la cajuela cuando escucho a alguien quejarse y gritar groserías al aire. Para su sorpresa se trataba de Victoria que trataba de guardar un gran cuadro en la pequeña cajuela de su coche. Al no lograrlo comenzó a destrozarlo, rompiéndolo y desgarrando la tela. July se puso nerviosa -¿Estas bien?- le preguntó a Victoria.
-Si, no te preocupes.- respondió prendiendo un cigarro.
-¿Por que lo rompiste?- titubeó July
- Porque es una mierda, como todo lo que hago.- respondió seria y se subió a sus coche. Arranco abruptamente pasando sobre los pedazos rotos del cuadro.
July se acerco a mirar la s piezas y no parecía estar nada mal con la pintura, lo poco que se veía era bastante bueno. Consternada por los sufridos subió a sus coche, puso la música en un fuerte volumen y condujo a casa.

Ya en casa su hermano mayor , Alex, le preguntó sobre su día pero al conocerla bien, notó en su mirada que algo no estaba bien.
-¿Te están molestando?- preguntó Alex. A lo que July contesto que no. Alex no se creyó nada pero decidió dejar de insistir pues sabía que July le contaría en su momento.

Alex era tres años mayor y estudiaba la universidad. A diferencia de July, él era bastante extrovertido y siempre parecía estar rodeado de amigos. Siempre buscaba la manera de apoyar a July pero aveces le costaba trabajo pues por lo mismo no le contaba todo sin embrago, el siempre estaba ahí.

Al día siguiente en la escuela, Victoria y July de nuevo compartían una clase. En ésta ocasión era Literatura y ambas se sentaron en la parte de atrás del salón. Victoria dibujaba concentrada durante la clase, perdiéndose del medio que la rodeaba y July solo trataba de poner atención. Antes de finalizar la clase, la maestra les explico que tenían que hacer un proyecto para fin de periodo en parejas. Todos comenzaron a levantarse y es salón se llenaba de ruido mientras elegían a su pareja.

July miraba a su alrededor nerviosa sin encontrara a alguien con quien trabajar. La única que parecía estar sola era Victoria, pero tan solo el eh echo de acercarse a ella le causaba cierto temor.
-¿Quien es tu pareja?- preguntó la maestra a July.
- No tengo, creo que no queda nadie.- respondió nerviosa.
Un chico alto y delgado río y grito al aire -Aún queda Victoria, que supongo es lo mismo que nadie.-
-¡Silencio! ¡No tolero esas conductas Diego!- dijo la maestra enojada. Regreso la mirada hacia July y regresando a su tono amable le dijo -Puedes trabajar con Victoria.-
July acento con la cabeza y se acercó a Victoria, quien miraba con odio a Diego.
- Creo que trabajaremos juntas.- dijo July tratando de ser amable.
- Así es.- dijo Victoria con una fría mirada y continuó dibujando en su cuaderno.

El receso lo volvió a pasar sola July, lo cual le causaba una gran angustia. Tenía un fuerte temor a estar sola y por más que buscaba hablar con alguien, parecía que todos se cerraban. Recurrió a caminar por los pasillos de nuevo y para su sorpresa de encontró con Sarah y dos de sus amigas. Al cruzar frente a ellas pudo escuchar como crítica a su ropa, su cabello y básicamente a ella, por lo que nerviosa corrió hacia el baño. Trató de contener las lágrimas pero un par de ella corrían por su alargado rostro. July no entendía por que nadie podía ser amable con ella, había decidir no llamar la atención pero no esperaba tanta frialdad de sus compañeros.

El día para July acabo de la peor manera. Las críticas tan solo eran el prefacio de lo que estaba por venir. Al salir notó que su coche había sido pintado con plumón y en el parabrisas habían escrito "Cara de caballo" y como detalle final le habían vaciado un café enzima. Al ver esto la cabeza de July comenzó a pesarle, sus manos se adormecieron y su corazón latía rápido. Lentamente de acercó al coche y con cada paso que daba una nueva lágrima brotaba de sus ojos. Detrás de ella escuchó que alguien gritó -Esas maldigas perras.- Se trataba de Victoria que al ver la escena corrió hacia su coche para sacar un viejo trapo. July seguía pasmada y solo miraba como Victoria quitaba lo escrito en el parabrisas con ayuda de una botella de agua y el sucio trapo.
-¿Estás bien?- preguntó Victoria guardando sus cosas en el coche.
- No se.- respondió July llorando.
- ¡Son de lo peor! Te destruyen por todo. ¿Quieres un cigarro?.- dijo Victoria, quien por primera vez mostraba su lado amable.
-No fumo.- respondió July pero unos segundos después cambió de opinión y aceptó el cigarro que Victoria tenía en su mano extendida.
El pequeño y delgado chico llego casi corriendo -¿Qué pasó aquí?- preguntó recuperando el aire.
- Nada Andres, ya sabes cómo son Sarah y sus amigos.- dijo Victoria prendiendo su cigarro.
Andrés miró preocupado a July pero antes de decir alguna otra cosa se dio la vuelta y regresó con su grupo de amigos.
- El es Andrés, es buen chico.- continuó Victoria mientras lo miraba irse con sus amigos.

July seguía sin poder decir mucho. Sentía una gran desesperación de no entender las actitudes de sus compañeros y para causarle más angustia, tampoco entendía las actitudes de Victoria. Había sido grosera y ahora la defendía, no sabía lo que debía pensar de ella y esa idea le dio vueltas por la cabeza todo el camino a casa.

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⏰ Última actualización: Jan 17, 2019 ⏰

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