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-Tengo 18 años, no tiene mucho que los he cumplido y con obvias razones estoy a punto de terminar la prepa, se podría decir que una de las mejores, pero no diría que la mejor. Tengo amigos, claro que los tengo e incluso convivo con ellos, pero no en la mayoría de mi tiempo, ya no.

-Me pregunto ¿Qué pasó con la chica? ¿O pensaron que yo era la chica? No, yo no soy la chica, sólo les vine a contar desde mi punto de vista lo que pasó con la chica o en su gran mayoría, ya que fue mi mejor amiga, incluso mi crush y no, ni ella, ni yo llegamos a sentirnos completamente homosexuales, pero eso ahora no tiene mucho que ver en la historia.

***

-Era la tarde del viernes 3 de julio de 2015, cuando aquella chica tan amistosa y sonriente salía de la preparatoria, con sus otras dos mejores amigas, Lily Collins y yo (Vanessa Morgan) . Era una de las mejores amistades que uno pudiera tener o incluso querer; éramos inseparables, nos contábamos todo o eso creímos nosotras.

-Fuimos a una cafetería llamada "Loli's pop", estaba cerca de la preparatoria. En el camino íbamos hablando de los chicos, de las bandas que nos gustaban, de las otras chicas, incluso un poco de la escuela.

-Nos sentamos en una de las mesas de la esquina, ese era nuestro lugar, en una de las paredes llevaba nuestras iniciales, nombre y apellido, hasta donde yo tengo memoria.

-La chica pidió una malteada de frutos rojos, Lily un café negro y yo una malteada de fresa, cada quién con sus bebidas y respectivos postres. Cada viernes teníamos una tradición, pedir un postre nuevo y que las tres pudiéramos mezclar lo que quisiéramos con el postre, ya sea ponerle miel, mermelada de todo tipo, queso crema e incluso crema para pasteles.

-Cualquiera que nos viera diría que fuimos criadas como trillizas, nuestras madres también eran mejores amigas, se embarazaron casi en las mismas fechas, todo era como de película. Hasta que esa misma tarde sus padres la encontraron desmayada/muerta en su recámara, con unas pequeñas notas que eran algún tipo de pistas para saber más sobre aquella muerte o ¿Suicidio...?

Un año atrás...

-Era verano, la chica, Lily y yo estábamos en la casa de Tyler Posey, él siempre hacía las fiestas, su casa era demasiado grande, tenía una piscina y sus padres casi nunca estaban en casa, así que él siempre ponía su casa.

-Había muchos chicos y chicas de la escuela, demasiado alcohol y se podría decir que un poco de drogas, no éramos unos inocentes, cada persona de esta fiesta había probado cuando menos la marihuana.

-Cole Sprouse, el capitán del equipo de fútbol, atletismo y de lucha, un chico alto y no tan musculoso, su cabello era castaño y un poco largo, sus ojos de un color verde claro; intentaba ser un galán con la chica, siempre iba a buscarla, le llevaba flores, chocolates e incluso uno que otro peluche, incluyendo siempre una carta o poema.

-Cole se empezó acercar a nosotras, tenía una bermuda, realmente es demasiado guapo.

Cole: Hola chicas, ¿Cómo están?-hizo media sonrisa muy amigable.

Lily: Muy bien Cole, ¿Cómo estás, tú?-se mordió el labio y alzó un poco de la silla.

Cole: Bien, Lily-se rió y vió a la chica- y tú, ¿Cómo estás?-La miró y salió una pequeña chispa de sus ojos.

La chica: Bien gracias, Cole-se paró de la silla, se puso frente de él poniéndose de puntas, le dió un pequeño beso en la mejilla. Se separó de él y entró a la piscina.

-Cole se quedó ahí parado, un poco sonrojada y la siguió con la mirada a la chica, hasta que se metió a la piscina.

Vanessa: Deja de ver, pervertido-reímos y él se fué. Lily y yo, nos quedamos platicando sobre unas cosas mientras bebíamos un poco de cerveza, la chica salió de la piscina y se puso una toalla de baño intentando secar el exceso de agua. Empezó a tomar con nosotras mientras se secaba un poco más.

-Pasaron las horas y ya era de noche, la mayoría de personas que estaba en la fiesta ya se habían pasado de cervezas o incluso de la droga, así que empezaron a prender un poco más la fiesta, era obvio que la piscina ya no estaba abierta para ninguno.

-Lily ya se había ido para su casa, ella estaba un poco más tomada que yo y la chica. Me empecé a marear un poco más al caer la noche, no dejaba de beber, estaba muy roja, todavía podía mantenerme en pie y tenía conciencia de lo que hacía.

-La chica ya estaba un poco más tomada, sí se podía sostener, pero ya no podía hablar muy bien que digamos, le pedí a Tyler si nos podíamos quedar a dormir en el cuarto de invitados a lo que él accedió, nos prestó unas camisetas y unos shorts para que pudiéramos dormir.

-Me cambié rápido, dejándome las bragas solamente, la chica empezó a tambalearse un poco más, a lo que recurrí a ayudarla a cambiarse para que se pudiera dormir, cuando ya tenía la camisa, le pude quitar el brasier y no ver nada que no debía. La acosté y me acosté junto a ella, pero ella, no quería dormir aún.

-Me abrazó y no dije nada, estaba tomada, era obvio que no sabía que hacía en esas circunstancias, cerré mis ojos para poder relajarme, pero sentí que la chica se ponía encima mío. Cuando abrí los ojos, la chica ya me tenía agarrada por las muñecas, estaba encima mío y no me dejaba hacer ningún movimientos.

La chica: ¿Sabes cuántas ganas tenía de hacerlo, pero no el valor?-se empezó a acercar más su cara hacia la mía- y ahora qué estoy ebria, puedo hacerlo y tal vez ni tú, ni yo lo vamos a recordar-sentía como sus labios rozaban con los míos.

-La chica me besó, un beso pequeño, no sabía cómo reaccionar en ese momento. Sentí sus manos un poco frías en mi cara, me volvió a besar, pero ahora un poco más apasionado.

-Ella era linda, demasiado para poder intentar algo con ella, pero es mi amiga y solo eso.

-Sentí como ella se separaba para poder tomar aire, pero de igual manera duramos 5 segundos viéndonos. Cuando sentí todo su peso en mi, al parecer después de besarme y separase de mi, se había desmayado. La quité encima de mi para ponerla a un lado, para que pudiéramos dormir bien. Ella se acurrucó en mi pecho inconscientemente y yo la abracé.

-Fue un poco extraño, pero al parecer fue demasiado cómodo para mí tenerla cerca mío y ese beso ¿Qué habrá significado? ¿Realmente lo que dijo era verdad? No lo sabría, hasta que me lo pueda llegar a explicar sobria.

-Un rayo de sol entraba por la ventana y pegaba directo a mi cara. Intenté abrir los ojos, poco a poco para que me pudiera acostumbrar a la luz del día. Me paré con mucho cuidado para no despertar a la chica y me mareé al pararme, sin contar el terrible dolor de cabeza y la sed inmensa que tenía en la mañana.

La chica:¿Qué haces ahí parada? Ven-golpeó un lado de la cama para darme indicación a dónde ir.

-Me acerqué y acosté nuevamente a su lado, nuevamente se acurrucó en mi pecho, pero esta vez abrazándome. Tenía un hermoso olor, no era muy conocido por las personas, pero era única su fragancia, era una mezcla de frutos, pero no tan fuerte, sino un poco más suave. Entrelazó su mano con la mía.

-Nos quedamos una hora más así, ella estaba acostada y al parecer se había quedado nuevamente dormida, así que lo único que hice fue admirarla verla dormir, con su respiración tan tranquila. Mi mente no dejaba de pensar en lo que había pasado anoche, no me molestaba que me haya besado, no puedo decir que soy heterosexual, porque realmente ya había deseado poder besar a la chica, pero nunca creí hacerlo.

-Sentí que la chica se empezaba a mover y eso hizo que volviera al planeta tierra. La ví y me regaló una cálida sonrisa, por lo que se la devolví, nos quedamos viendo por algunos segundos y ella se volvió a poner encima mío.

La chica: No recuerdo mucho de lo que haya pasado anoche, pero sí recuerdo haberte besado-se sonrojó y mordió su labio- pero quiero decirte que no me arrepiento de haberlo hecho -me vió muy seria.

Vanessa: No sabría qué decirte, yo no estoy molesta, sólo quiero saber, ¿Por qué? ¿Por qué me besaste y esperaste a estar ebria para hacerlo? -sentí demasiado calor.

-La chica empezó a acercarse un poco más hacia mi. Sus manos empezaron a recorrer mi cuerpo, sin adentrarse de la camisa.

La chica: Siendo sincera ya lo quería hacer, pero como te dije ayer, no tenía el valor de hacerlo -me dió un pequeño beso- me gustas, desde cuándo me has gustado, pero por miedo a que me llegaras a rechazar, no te quise decir nada.

-Me quedé viéndola un buena rato sin poder contestar nada, estaba en shock, todavía procesaba eso.

La chicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora