poemas negros

Cenizas

Te amé, me amaste, en algún momento donde todo era imposible nos amamos. Te lastime, me lastimaste en algún punto del proceso nos hicimos daño. Me resigne, te resignaste, ambos nos rendimos, pero no me vengas con esa patética excusa de que no me mereces cuando ambos en algún momento merecíamos estar juntos. No me digas que estás muy herido como para intentarlo cuándo yo he logrado levantarme mil veces del mismo golpe. Ya no sigas diciendo que me amas pero que necesitas tiempo cuando yo sigo dedicando mi tiempo a esperarte, cuando no me importo tener esperanzas el día que decidiste que jamás podrías enamorarte. No me sigas diciendo que soy importante, que con el tiempo tal vez algo pase, que somos libres de estar con quien queramos pero que por tu parte no harás nada con nadie. Que seamos amigos de esos que se cuentan todo, que nos besemos pero cuando estemos solos, que no te trate tierno porque parece falso, que por ahora no quieres tener nada con nadie. Sigo conteniendo este sentimiento amargo que pinta a ser correspondido solo con palabras dichas al viento sin ningún testigo. Sigo sin darle importancia a tu crueldad, a tu desinterés, a ese amor que dices tener pero que cada día es más distante, sigo sin contarme aquella cruda verdad, esa que aun no me dices pero que todos saben, esa que necesito aceptar el día que decidas contarla. El dia que te vuelva a dejar de importar tenerme cerca, el dia que vuelvas a pensar solo en ti y te alejes para siempre, el día en que tengas que disculparte por todas las promesas que no podras cumplirme, el dia que te vayas con las excusa de que es lo mejor para ambos.