40🖤

44 3 0
                                    

[+18]

—Me divertí mucho hoy, Abraham— Dije cuando estaba en él umbral de la puerta de mi casa.

—Ese era el punto— susurró con una sonrisa en su rostro.

Me acerqué a él juntando nuestros labios.

Estos sabían a menta, como siempre lo hacían. A diferencia de los míos, que seguro sabían a chocolate gracias al postre.

Abrace sus hombros y él mi cintura.

Empezó a mover sus labios lentamente sobre los míos a lo que yo respondí con los mismos movimientos.

De un momento a otro el intento abrir un poco mis labios, pidiendo permiso para adentrar su lengua en mi cavidad bucal.

Yo lo permití dejando que su lengua explore cada espacio de mi boca mientras yo también lo hacía en la suya.

Empezamos a pelear.

El beso había subido a un nivel al que no habíamos llegado antes.

Empezamos a caminar hacia atrás cerrando la puerta detrás de nosotros.

Él tomó mis piernas y en un movimiento enrollé mis piernas en su cintura mientras subía las escaleras.

—A la derecha— gruñí refiriéndome a mi habitación.

Se dirigió a ella a paso lento, y al llegar me apoyo en la puerta besándome con mas pasión.

Sus besos descendieron por mi cuello, y luego volvieron a mi boca. Abrió la puerta.

Camino lentamente hasta la cama, donde me recostó e hizo lo mismo pero esta vez encima mío, separando mis piernas y dejándome sentir su erección debajo mío.

Él tocó la piel de mi espalda hasta encontrar el cierre del vestido, bajándolo hasta el tope.

Descendió mi prenda hasta que llegase hasta mis pies.

Me observo por un segundo, a mi cuerpo semi-desnudo.

Luego de eso, siguió con sus besos, pero esta vez en mi cuello logrando excitarme.

Tomé la orilla de su camisa lentamente, mientras la sensación de deseo recorría cada parte de mi vientre.

Desabroche lentamente botón por botón, dejándome ver a su marcado abdomen.

No me sentía mal, se sentía todo lo contrario al sentimiento de estar mal.

No me sentía vacía como con Mac.

Me sentía extrañamente satisfecha de tener a Abraham a mi lado.

Desprendí el botón de su pantalón, dejando a la vista su erección.

—¿Estas segura que quieres hacer esto?— Me Preguntó mirándome a los ojos con los suyos que no demostraban más que deseo.

—Si— acepte estirando mi mano hacia mi mesa de luz, donde había un cajón en el que mi madre me obligaba a tener preservativos.

Lo saqué y se lo entregué.

—Te amo— me susurró al oído y luego volvió con el juego de besos, bajándolos hasta mis pechos.

Posó sus manos en el borde de mi sostén, desprendiéndolo lentamente y dejándolo caer al suelo como todo lo demás.

Empezó a besar mis pechos con suavidad.

—Eres muy bella— soltó entre gemidos.

Devolvió sus besos a mi boca, mientras sacaba lentamente la prenda que me quedaba.

Enganche mis piernas alrededor de su cintura, sintiendo su erección encima de mi.

Quite sus bóxers dejando a su gran, encerio, gran miembro libre para mi vista.

Se colocó el condon mientras tocaba mi clitoris que se encontraba completamente mojado.

—Voy— Me avisó entrando en mi, a lo que respondí con un grito a la vez que clavaba mis uñas en su espalda.

—Te amo— susurré en su oído a la vez que sus movimientos se aceleraban.

—Yo te amo ti— respondió.
Empecé a subir mis caderas igualando el ritmo de la suya.

El sentimiento de placer se hacía cada vez más presente, apareciendo así en mi vientre, diciéndome que estaba por tener un maravilloso orgasmo.

—V-voy a llegar— susurré.

—Yo t-tambien—.

Gemí fuertemente a la vez que me aferraba a él, llegando al orgasmo juntos.

Él salió de encima mío desplazándose aun lado sin soltarme.

—Te amo—.

—Y yo a ti–.

WhatsApp [A.M] (Adaptada)Where stories live. Discover now