19 de noviembre, Buenos Aires, ARG.
Ruggero's POV
Los segundos van pasando lentamente mientras espero su respuesta. Siento como si fueran eternos. No lo voy a negar, la voy a extrañar muchísimo. Y sí, la verdad me arrepiento de todo el daño que le causé hace casi dos años. Pero por así decirlo esta es la última vez que estaremos juntos, supongo qué hay que aprovecharlo.
— Está bien Ruggero —Contestó la chica que tenía frente a mí en un susurro—. Será la última.
Una sonrisa se dibujó en mi rostro al escuchar su respuesta, con la mano que tenía libre la tomé de la mejilla, acaricié su labio inferior con el pulgar y segundos después uní nuestros labios en un suave beso. Lentamente introduje mi lengua en su boca, a lo que la suya correspondió al instante haciendo el beso más apasionado, mientras ella me rodeaba el cuello con sus brazos y acariciaba ligeramente el pelo de mi nuca. Al instante la mano que tenía en su mejilla descendió con caricias hasta su cintura, acompañando a la otra y la apreté más a mi cuerpo. El beso no estaba siendo tan intenso ni tan tranquilo. Sólo el ritmo necesario para que ambos lo disfrutáramos al máximo.
Mordí su labio inferior y tiré de el suavemente para dar el beso por terminado y descendí por su mandíbula con besos húmedos y ligeros mordiscos hasta llegar a su cuello. Ella jadeó al instante y echó la cabeza hacia atrás mientras me agarraba de la nuca impulsándome a besar más su cuello. El olor de su perfume invadió mis fosas nasales. Una de las cosas que me encanta es eso, que siempre le gusta oler bien y todos los aromas de los perfumes que se pone son divinos. Dejé de besar su cuello unos segundos para mirarla a los ojos, sus manos bajaron hasta mis hombros repartiendo caricias hasta llegar a mi torso; donde apoyó sus dos manos y me dió un beso rápido en los labios.
— Ven conmigo —Seguido de decir eso la tomé de los muslos, cargándola, haciendo que envuelva sus piernas en mi cintura y la senté encima del tocador del camarín.
En este espacio publicitario quiero darle las gracias a Alejandro y a Alan por recoger todas sus cosas, ya que solo quedaba Karol en el camerino y al parecer estaban por irse.
Empezó a besarme nuevamente como si quisiera mantener el control de todo, y, sólo fui capaz de seguirle, mientras repartía caricias por su espalda, por encima de la blusa, claro. Metió las manos por mi camiseta y me acarició todo el abdomen debajo de esta. Estaba por sacarme la camiseta...
— ¡Karol! —Era Carolina que gritaba su nombre, mierda.
Automáticamente dejamos de besarnos, respiró profundo para tomar aire y poder contestarle.
— Ruggero, escóndete en el baño. Ya vengo. —Acaté su orden y entré al baño que había dentro de su camarín. Dejé la puerta un poco abierta para poder ver y escuchar.
Karol abrió la puerta.
— ¡Acá estoy mamá! —Contestó, asomándose, mirando hacia el pasillo.
— ¿Qué tanto haces ahí? Recuerda que tenemos que irnos. —La ví asentir.
— Sí sí, lo que pasa es que aún me faltan algunas cosas por recoger para que no se me quede nada. —Hizo una pausa—. Y... Ruggero me dijo que vendría a hablar conmigo.
— Pero si ya todos se fueron Karol, solamente está la producción terminando de desmontar el escenario. —Le recordó. Carajo.
— Ah, si... verdad... es que... —Ay vamos que se le ocurra algo rápido. A pesar de ser actriz no le gustaba mentirle a su mamá—. El me dijo que primero tenía que ir a su departamento por algo que quería darme. —Mintió a la perfección. Esa es mi chica.

YOU ARE READING
Reflejo »Ruggarol«
Fanfiction❝Eres, ese reflejo que quiero mirar. Tienes la vida que me hace falta para continuar❞